El conductor del camión que el miércoles por la mañana atropelló en el paseo del Violón a una mujer de 52 años, causándole la muerte, ha confesado ante los agentes de la Policía Local que no puso el freno de mano cuando se bajó para recoger material en un taller cercano, por lo que el vehículo se desplazó hacia atrás y la arrolló.
El camión ha sido objeto de una primera revisión por parte de un equipo especializado de la Policía Local que ha verificado que el sistema del freno de mano funciona correctamente, aunque el vehículo continúa en el depósito a falta de que se le practique una inspección ocular más exhaustiva cuyos resultados se incluirán en el informe que se remitirá al Juzgado, según han informado a Europa Press fuentes de este cuerpo policial.
Tanto el conductor como el vehículo tienen todos los documentos en regla, él dio negativo en la prueba de alcoholemia y no se han encontrado infracciones de la normativa en la inspección del tacógrafo. De estos y otros asuntos dará cuenta al Juzgado la Policía Local, que será la encargada de realizar las diligencias de investigación.
El accidente, en el que también resultó herido un hombre, se produjo sobre las 11,45 horas, cuando el camión, que estaba estacionado en el callejón del Ángel, arrolló a esta peatona en un paso de cebra, cerca de la rotonda que hay antes del Palacio de Congresos.
Los efectivos de Policía Local practicaron los ejercicios de reanimación cardiopulmonar a la víctima a su llegada sin éxito, pues la mujer perdió la vida a causa del accidente, de modo que el conductor podría ser investigado por un delito de homicidio imprudente, según precisan las fuentes.