Los separatistas prorrusos de la autoproclamada república de Donetsk aseguraron hoy que evacuaron a más de 300 ciudadanos en la última jornada de la ciudad ucraniana de Mariúpol, hacia dos localidades controladas por Rusia.
En total, según informó la defensa territorial de la autoproclamada república, se evacuaron 314 personas de la ciudad a orillas del mar de Azov, entre ellas 50 niños, de acuerdo con la agencia oficial TASS.
Los ciudadanos fueron trasladados a Bezimenne y Novoazovsk, según los separatistas prorrusos.
Según los rebeldes prorrusos, desde el 5 de marzo un total de 32.638 personas fueron evacuadas a Bezimenne.
De acuerdo con las autoridades ucranianas, aún quedan unos 100.000 ciudadanos en Mariúpol, además de los defensores que resisten en la asediada acería de Azovstal.
Actualmente Kiev negocia la evacuación de 38 combatientes gravemente heridos, pero hasta ahora Moscú se niega a permitir la salida de estas personas sin que se rindan con la señal de una bandera blanca.
Un comandante de una unidad militar prorrusa de Donetsk dijo hoy, según la agencia Interfax, que diez soldados ucranianos se habrían rendido, algo que Petró Andryushchenko, asesor del alcalde de Mariúpol, negó inmediatamente como "información falsa" en su canal de Telegram.
