Además de abonar los sueldos de los tripulantes, el armador ha aprovisionado el buque con 40 toneladas de gasoil, así como con alimentos.
El coordinador del sindicato ITF (Federación Internacional de Trabajadores del Transporte) para España, José Manuel Ortega, señaló que “el armador al final ha aparecido y ha pagado todas las deudas”. Así, a partir de ahora restará reparar la embarcación para que se levante la retención impuesta por Capitanía Marítima tras detectar varias deficiencias que impedían su salida de puerto. En principio, desde ITF se prevé que el periodo para llevar a cabo las reparaciones “no será muy grande y en cualquier caso inferior a un mes”.
Por otra parte, el armador ha anunciado su intención de repatriar a la tripulación que no quiera continuar el viaje hasta el puerto congoleño con la carga de cemento que transportan. Según Ortega, en la mayoría de los casos los marineros optarán por regresar a sus países de origen.
Sin embargo, el coordinador de ITF recuerda que “si bien han solicitado la repatriación por impago continuado, se trata de una decisión muy personal”. De esta forma, probablemente, el armador deba traer una nueva marinería para que el buque continúe el viaje.