En esta ocasión, el manifiesto contra la violencia de género fue preparado por la Vocalía de la Mujer de UGT de Chiclana. Su titular, María del Carmen Alcántara, fue la encargada de leer un texto “anónimo que encontré en internet” en el que a modo de repaso histórico repasó las situaciones de esclavitud y explotación de todo tipo a la que se han visto sometidas las mujeres en las distintas civilizaciones y culturas que se han ido desarrollando por todos los rincones del planeta.
“Siempre sirviendo a todos”, lamentaba el escrito, “con largas cadenas que los siglos nos cargaron a cuesta”, pero con la clara convicción de que “las mujeres por fin lo descubrimos: somos tan poderosas como ellos” y con una conclusión absolutamente integradora: “Amasar con las manos de ambos sexos el pan de la existencia”.
Los concentrados, entre los que se encontraba el alcalde y varios miembros del equipo de Gobierno, guardaron cinco minutos de silencio por las 80 mujeres que han sido asesinadas por sus maridos, compañeros o familiares en lo que va de año mientras el terceto de violín, chelo y flauta travesara interpretaba el Canon de Pachelbel.