La escritora, que ejerce también como profesora de Historia en Vélez Málaga, ha expresado a Efe su intención de diseñar en la costa tropical granadina un escenario de aprendizaje con diferentes interpretaciones y lecturas, para crear así un mundo literario autónomo que sea válido en sí mismo.
La novela relata en primera persona -con pequeñas dosis de sátira y crítica hacia el entorno social- las peripecias de un joven profesor de instituto que ha sido destinado por error a un lugar que odia, donde tratará de alcanzar su madurez.
Sin embargo, la muerte de una chica cambia por completo el paisaje, lo que condicionará la trama y, en este sentido, la autora del libro ha destacado la relación entre la literatura negra y la sociedad, que están muy arraigadas.
Para Herminia, que ha escrito algunos ensayos contra el deporte -algo por lo que, según ha explicado, ha recibido varias críticas- la novela, "un artefacto literario", es una herramienta cognoscitiva y "absolutamente imprescindible".