Los policías celebraron la Nochebuena encerrados en las dependencias municipales, acompañados de sus esposas, y han insistido en que su intención es mantener la protesta de forma indefinida hasta que sus demandas sean atendidas.
Medio centenar de agentes del centenar que integran la plantilla de la Policía Local se turnan desde hace once días para mantener el encierro.
Un portavoz de los encerrados ha explicado que el Consistorio les adeuda seis nóminas y que piden al menos el pago de tres en enero para levantar su encierro.
"Anoche fue muy duro -ha comentado-, vino mi mujer, pero yo, por ejemplo, pedí que no vinieran mis hijos porque lo están pasando muy mal".
Uno de los policías leyó un manifiesto durante la cena en el que se destacaba la dureza "del distanciamiento de las responsabilidades del hogar" y se hacía un llamamiento "a no abandonar".
"Nuestro esfuerzo hace que todo esto merezca la pena", indicaba la nota, cuyos firmantes aseguraban que estaban dispuestos a continuar "pese al cansancio acumulado".
El agente ha destacado que los policías encerrados han optado por esta medida porque la consideran más eficaz que las protestas en las frontera con Gibraltar y porque no quieren perjudicar a los ciudadanos de La Línea ni del Peñón.
"Se están volcando con nosotros, nos están dando ropa, alimentos, dinero y juguetes porque aquí todo el mundo conoce la situación de los trabajadores municipales", ha dicho.
La Policía Local entrega todo lo recibido como donaciones a Cáritas para que lo distribuya entre los afectados. EFE