Sin embargo, otras cuestiones, especialmente las relacionadas con las modalidades de contratación o el pacto de moderación salarial, siguen lejos del acuerdo entre los agentes sociales, por lo que las mismas fuentes ven "factible" que sobre la mesa del presidente del Gobierno solo haya para Reyes un acuerdo parcial.
"Para eso está ahí el primer trimestre", recordaron las mismas fuentes, que indicaron así que las negociaciones sobre los asuntos más complejos podrían continuar más allá de la fecha marcada. Por lo pronto, hoy seguirán sucediéndose los contactos mientras los líderes sindicales despachan con la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y continuarán la próxima semana al más alto nivel.
Uno de los puntos más cercanos al acuerdo es el de la reorganización de los festivos que dependen del Gobierno Central. Los agentes sociales han partido del Estatuto de los Trabajadores que establece cuatro festividades que no se pueden tocar: el primero de mayo, Navidad, Año Nuevo y el Día de la Hispanidad del 12 de octubre. El resto, hasta los 14 días festivos, el Estatuto solo recomienda pasarlos al lunes.
Así, el acuerdo supondría no modificar estas disposiciones, ni tampoco el sistema de jornada anual que contemplan la mayoría de los sectores e incluso potenciarla, así como tener en cuenta la conciliación de la vida laboral y personal, y dejar en manos del Gobierno el posible traslado de tres festivos al lunes.
Según precisan las mismas fuentes, habría un pacto para trasladar el Día de Todos los Santos (1 de noviembre) y la Asunción de la Virgen (15 de agosto), mientras que la discrepancias estarían entre el de la Inmaculada Concepción (8 de diciembre) --que la CEOE rechaza por suponer tres festividades religiosas -- y el Día de la Constitución (6 de diciembre). En cualquier caso, una y otra fecha supondría acabar con el 'macropuente' de diciembre. La patronal quiere que el cambio de los festivos opere ya desde 2012.
Además, estaría "prácticamente culminado" un acuerdo para un nuevo Acuerdo de Solución Extrajudicial de Conflictos (ASEC) --que actualmente tiene vigencia hasta el 31 de diciembre de 2012-- desde enero del próximo año hasta 2016.
Este arbitraje afectaría a la negociación colectiva de ámbito nacional, sería "voluntario", tendría mayor vinculación a las comisiones paritarias y se extendería a otros litigios como los plazos máximos de negociación de convenios, para solucionar el problema de la ultraactividad (prórroga automática de un convenio en ausencia de su renovación).
Además, este arbitraje tendría eficacia "general y directa", de modo que aquellas empresas que no se quieran adherir tendrán que comunicarlo expresamente y tendrán un plazo de unos tres meses para acordar con los sindicatos otras vías de solución extrajudicial. Dentro de este acuerdo se incluiría también una fusión de las listas de árbitros de todos los agentes sociales y una búsqueda de más profesionalidad con reforzamiento de su formación continua.
Uno de los problemas que plantea este nuevo acuerdo, según las mismas fuentes, es que "requerirá apoyo económico" desde el sector público en plena etapa de recortes. Los otros puntos de encuentro que estarían prácticamente cerrados son los de mutuas y absentismo y formación.
CEOE PIDE "CRECIMIENTO EXTREMADAMENTE MODERADO" DE LOS SALARIOS.
En cuanto a los desacuerdos, las mayores fricciones siguen centradas en la renovación del acuerdo de moderación salarial hasta 2014. Aunque las fuentes indicaron que aún no se ha hablado de "aritmética", señalaron que la postura de la CEOE es la de un "crecimiento extremadamente moderado" de los salarios, sin llegar a hablar de congelación.
En el caso de los sindicatos, apuestan por una moderación salarial, pero no hasta ese punto, y ponen la barrera de lo "extremo" en aproximadamente el 1%.
Asimismo, aún aleja a las partes la petición por parte de la CEOE de desindexar los salarios y vincularlos a productividad. En este terreno, los sindicatos estarían poniendo de manifiesto la dificultad de conocer datos objetivos sobre productividad, aunque estarían abiertos a ligar los salarios a otras fórmulas, como la inflación subyacente (IPC sin precios energéticos ni alimentos frescos), o hablar de salarios fijos y variables.
Además, los sindicatos piden que se respete el vigente acuerdo de moderación salarial para 2012 --entre el 1,5% y el 2,5%-- en el caso de los convenios plurianuales con efectos en el próximo año, cuestión en la que las fuentes consideran que hay "bastante cercanía".
CONTRATACIÓN.
Por otro lado, las partes siguen negociando sin visos de acuerdo otras materias que deben tener, eso sí, la última palabra del Gobierno. Es el caso de la contratación, en el que hay tres frentes abiertos.
El primero sería el contrato de formación, actualmente limitado temporalmente a los trabajadores de hasta 30 años, pero destinado más adelante a aquellos de hasta 25 años, que la CEOE quiere desvincular de un límite de edad.
Además, la patronal quiere reducir su carga de formación retirando la obligación de que estos trabajadores tengan que estar guiados por un tutor en la empresa, responsable que los sindicatos piden que corra a cargo de los Servicios Públicos de Empleo. Además, las centrales persiguen que esta modalidad sirva de base para un futuro sistema de formación dual.
Otras cuestiones en el aire son el impulso de la contratación a tiempo parcial y de la conversión de contratos temporales en indefinidos, añaden las mismas fuentes.
Por otro lado, la CEOE ha planteado, sin concretar, los costes del despido, aunque es una cuestión que en principio no está en la bolsa de temas que Rajoy trasladó a los agentes sociales.