El deportista, de 25 años, permanece en coma inducido en la clínica universitaria de Innsbruck después de caer de forma muy violenta, de espaldas y a gran altura, en el tramo final del entrenamiento del Hahnenkamm, el descenso más rápido y peligroso del calendario de la Copa del Mundo de esquí alpino.
Albrecht ingresó con un traumatismo craneoencefálico, contusión pulmonar y con posibles daños en la columna vertebral. Después de haber pasado una noche sin sobresaltos, los médicos no han encontrado señales de un posible edema cerebral y el funcionamiento de los pulmones y la circulación sanguínea se ha estabilizado. “Tal como evoluciona por el momento, no tenemos que hacernos preocupaciones exageradas”, explicó Norbert Mutz, director de cuidados intensivos de la clínica.