Los aledaños del Ayuntamiento de Sevilla, donde este viernes estaba programada la celebración de un Pleno ordinario, han sido escenario de las protestas protagonizadas por la Asociación de Artesanos Peluqueros de Sevilla, que teme un cierre masivo de negocios por la "abusiva" subida del IVA promovida por el Gobierno central del PP, y por los trabajadores del mercado central de abastos hispalense, Mercasevilla. Estos últimos rechazan la liberalización parcial de servicios acordada por la comisión ejecutiva de la compañía, extremo que afecta a cien de los 198 miembros de la plantilla.
La concentración de peluqueros, de hecho, ha propiciado un incidente en el Salón Colón, que acogía la celebración de la sesión plenaria, cuando el reputado profesional de esta rama Antonio Lebrón --con un centenar de empleados y 17 negocios bajo su gestión-- ha penetrado en el recinto y, "a título personal", ha empezado a proclamar sus argumentos en voz alta, interrumpiendo el debate y motivando así su expulsión.
"Quizás por responsabilidad personal no debería haberlo hecho, pues soy bastante conocido en el sector y medalla de Sevilla", ha expuesto Lebrón a Europa Press, indicando no obstante que "tenía" que hacerse "escuchar", pues "parece que el Gobierno central sólo está pendiente de Merkel y Draghi y esta subida del IVA es una salvajada". Asimismo, ha declarado tener "el teléfono inundado" con llamadas de gente del gremio expresando su respaldo.
Con todo, el empresario ha pedido perdón y ha añadido que escribirá una carta al plenario expresando sus disculpas. También ha asegurado que presentará una pregunta por registro en el próximo Pleno para exponer el asunto.
Por su parte, los trabajadores de Mercasevilla han protestado durante algo más de una hora y media a las puertas del Ayuntamiento, según ha manifestado a Europa Press el presidente del comité de empresa, Rafael Domínguez (CCOO). Como en otras ocasiones, los empleados de la lonja han arrojado al pie de las escalinatas del Consistorio chirlas podridas, lo que ha ocasionado un nauseabundo hedor a las puertas de la Casa Consistorial. La empresa pública de limpieza (Lipasam) ha movilizado de inmediato, no obstante, un dispositivo para limpiar el firme y combatir este mal olor.
Los trabajadores de Mercasevilla consideran que la "privatización" parcial de los servicios del mercado central, principalmente los correspondientes a la lonja de pescado, derivan de una "decisión política" carente de obligación jurídica.
