Que el lateral izquierdo es una de las posiciones más complicadas de cubrir, solo hay que echar un vistazo al mercado de fichajes para comprobar que sigue siendo una de las demarcaciones más complejas de adquirir año tras año. Una temporada más, el Racing Portuense debe fichar para dar con el jugador idóneo.
Seis temporadas y seis laterales izquierdos diferentes. En la 2006-2007 se producía la baja, la primera, de Ezequiel Arana, que tras su cesión por el Cádiz prefirió probar suerte en el Real Jaén. Posteriormente, su salida encontró la mala fortuna al caer gravemente lesionado tras su lesión de rodilla. Su sustituto natural fue el portuense Álex Cruz (primo de éste), que también llegaba de la cantera cadista y curiosamente, también, terminaba por firmar por el equipo jienense. Tras cuajar una buena temporada y cumplir con creces, sería fichado por el Nástic de Tarragona en Segunda División.
A la siguiente campaña, 2007-2008, el año de Albert Ferri su recambio fue completado por Rubén Anuarbe. Después del descenso a Tercera División sería el malagueño Kike Silva el que tomaría el testigo, alternando, en ciertos momentos, con el chiclanero José Carlos Melli.
El siguiente en cumplir con la tradición fue de nuevo, Ezequiel Arana, después de su salida varias temporadas atrás, regresó a la disciplina racinguista para realizar una más que completísima campaña, siendo uno de los jugadores más valorados. Esto provocó que San Fernando y Sanluqueño echasen los ojos sobre el defensor portuense decantándose éste por El Palmar.
Otro que prefirió no seguir y que se firmó como lateral izquierdo a pesar de hacer en ciertas partes del campeonato como falso central, es el jerezano Isaac, que tampoco continuó en su segunda temporada. El que vino como sustituto y con la intención de romper esa dinámica era otro viejo conocido de la afición, el gaditano Ezequiel Carreras, que tras su paso por el filial recreativista tomó el testigo. La historia, con denuncia por impago incluida, terminó como el Rosario de la Aurora.
La hora de Raúl López
El jerezano se unió al grupo y realizó buena parte de la sesión junto a los que pueden ser sus nuevos compañeros. Tras finalizar su etapa con el San Fernando, el defensor se encuentra más cerca que nunca de comprometerse y firmar por los racinguistas. El zaguero conoce a buena parte del plantel dado que la campaña anterior antes de firmar por los azulinos, se ejercitó con éstos.
La necesidad de reforzar el lateral izquierdo, obliga a tener que tomar una decisión al respecto, tras haber sondeado el mercado en busca de una de las piezas que faltan para terminar de completar la plantilla.
La salida de Álex Cruz, que volvió a ejercitarse junto al resto de la plantilla, parece más que evidente y solo es cuestión de tiempo, y que alguna de las ofertas que maneja maduren, termine por elegir alguna de ellas. El club es consciente que el cartel del portuense es importante y que su retorno está más que complicado, no imposible, pero sí muy difícil.
El futbolista, algo lógico, prefiere aguardar sin prisas y seguir esperando sabedor que se presentará un mejor panorama y una propuesta que se ajuste más al perfil de contrato del que busca. Mientras tanto, desde la secretaría técnica respetan y apoyan tal decisión, pero del mismo modo, deben mover ficha.
El tiempo se va agotando y las miras es tener todo controlado antes de que comience la competición y acudir a la primera jornada con el equipo tipo al 100%. Aunque no se cubrirán todas las fichas, bien es cierto que tanto las probaturas de Pedrito, Bajic o la última en Trebujena de Borja Peinado en el flanco izquierdo, van más puestas de cara a ensayar ante cualquier eventualidad a lo largo del ejercicio, que como una apuesta en firme para toda la temporada.
Otro de los jugadores que parecía lo tenía ya todo cerrado con el Antoniano y en la agenda rojiblanca, es Sergio Beato que aún no se comprometido de forma oficial con el equipo hispalense.