Los pilotos españoles Jorge Lorenzo (Yamaha) y Dani Pedrosa (Honda) volverán a librar un nuevo duelo en el trazado de Misano, rebautizado como Marco Simoncelli en homenaje del italiano y escenario a partir de este viernes del Gran Premio de San Marino, decimotercera cita del Mundial de Motociclismo, con el catalán intentando estrechar aún más el cerco sobre el liderato del balear.
Además, en la categoría de Moto2, Marc Márquez (Suter) quiere asestar el golpe casi definitivo para proclamarse campeón del mundo, mientras que en Moto3, Maverick Viñales (Honda) no tiene excesivo margen de error si quiere aspirar al título ante el sólido Sandro Cortese (KTM).
En la cilindrada 'reina', todo ha quedado ya en un mano a mano entre Lorenzo y Pedrosa, después de que el australiano Casey Stoner (Honda) haya dicho adiós al título por su lesión de tobillo. El de Castellar del Vallés llega, después de siete años en la categoría, a la recta final del campeonato con serias opciones de lograr la corona que le falta, aunque, de momento, el balear no falla en exceso y puede gestionar su ya corta renta de 13 puntos.
De momento, el catalán ha aprovechado la 'ausencia' del actual campeón del mundo para erigirse en la mejor opción de Honda para mantener el entorchado en 'casa'. Pedrosa, casi siempre relegado a un segundo plano por un compañero de equipo, ha evitado este año las caídas y a falta de seis pruebas llega en un gran momento tras encadenar las victorias en Indianápolis y Brno, su tope en MotoGP.
El español, que tendrá como nuevo compañero a Jonathan Rea, nunca ha logrado tres triunfos consecutivos en esta cilindrada, y de ser primero o segundo en Misano batiría su récord de puntos. En el trazado sanmarinense lleva tres podio consecutivos, con el recuerdo de la victoria de 2011.
Sin embargo, Lorenzo no dará facilidades. Inmensamente regular durante todo el año, salvo la caída en Assen, el mallorquín no se ha bajado del segundo puesto, lugar al que ha sido relegado en las tres últimas carreras por las Honda oficiales, y sabe que los mayores riesgos, de momento, los debe tomar Pedrosa, que es el perseguidor.
El piloto mallorquín suele rendir bien en este Gran Premio, que conquistó el año pasado y donde desde 2007 ha estado en el podio, con tres segundos puestos consecutivos de 2008 a 2010 desde su ascenso desde 250cc. También habrá que tener en cuenta la meteorología, con previsión de lluvia hasta el domingo, lo que alteraría la calificación.
Por detrás, e intentando estar cerca de esta 'batalla', estarán las otras dos Yamahas del equipo satélite, de Andrea Dovizioso y Cal Crutchlow, que pelean por el tercer escalón del podio y de la clasificación final, mientras que el italiano Valentino Rossi (Ducati) intentará rendir bien en un circuito que lleva el nombre de su fallecido amigo.
Álvaro Bautista (Honda) querrá estar cerca de la pelea por el podio, y Héctor Barberá (Ducati) vuelve a la acción tras la grave fractura de pierna y su posterior caída en los libres del Gran Premio de Indianápolis que le danó las vértebras y le hizo volver a ser baja en esa cita y en la República Checa.
MÁRQUEZ, A SENTENCIAR.
En Moto2, el español Marc Márquez (Suter) acude muy optimista para ampliar su actual brecha de 48 puntos sobre su compatriota Pol Espargaró (Kalex Pons) y poner la directa hacia un título que parece tener, por lo visto durante la campaña, claro color del de Cervera.
El ilerdense sólo ha fallado en Le Mans (Francia), donde sumó un cero, y en Mugello (Italia), donde fue quinto, pero ninguno de sus rivales ha logrado ser excesivamente regular y sólo Espargaró parece el más peligroso ya que el suizo Thomas Luthi (Suter) y el italiano Andrea Iannone (Speed UP) no encadenan resultados positivos.
Además, Márquez llega a un circuito donde ha triunfado en sus dos últimas visitas, a lo que hay que añadir sus victorias en Indianápolis y Brno, y de ganar el domingo igualaría su mejor racha en la categoría, mientras que el pupilo de Sito Pons no ha brillado en este trazado, donde nunca ha subido al podio y en el que en 2011 sólo pudo ser noveno.
VIÑALES NO PUEDE FALLAR.
Finalmente, en Moto3, el mano a mano es entre el sólido líder, el alemán Sandro Cortese (KTM), y el español Maverick Viñales (Honda), que no puede permitirse fallar más si quiere afrontar la recta decisiva, con dos Grandes Premios en España (Aragón y Valencia), con opciones.
El gerundense no acabó con buenas sensaciones en agosto, con tan sólo 13 puntos y ningún podio ni en los Estados Unidos ni en la República Checa, lo que le deja actualmente a 32 puntos del liderato, pese a ser el que más carreras ha ganado en esta campaña con un total de cinco.
Pero frente a eso están los números de Cortese, que ha sumado en todas las carreras y que en Brno perdió una buena opción de ampliar aún más su renta, al finalizar tercero tras su compatriota Jonas Folger (KTM) y el español Luis Salom (KTM), el mejor en los dos últimos Grandes Premios, con un triunfo en Indy y el referido segundo puesto en la República Checa, lo que la ha convertido en amenaza incluso para el segundo puesto de Viñales.
