Dos personas han perdido la vida y 17 más han resultado heridas por la explosión accidental ocurrida en la madrugada de este sábado en un vagón de mercancías que transportaba productos químicos en Wetteren, en la región de Flandes Oriental, en el norte de Bélgica, según ha informado el gobernador de la región, Jan Briers, citado por la radio RTL.
Ante el peligro de nuevas deflagraciones se ha establecido un perímetro de seguridad de unos 500 metros que incluye las viviendas de la zona, que ya han sido evacuadas. Además, a los vecinos que estén a menos de un kilómetro del lugar se les ha pedido que cierren puertas y ventanas y que permanezcan en casa.
El tren afectado trasladaba mercancías desde Países Bajos hacia el puerto de Gante, cuando en torno a las 2.00 horas de esta madrugada su conductor ha dado la señal de alarma tras descarrilar seis de los trece vagones del convoy.