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Huelva

La producción de mandarina en la provincia ha aumentado un 40% en los últimos diez años

La provincia se ha convertido, con diferencia, en la primera productora de este fruto en Andalucía con el 51 por ciento del volumen, seguida por Almería con un 20 por ciento y por Sevilla con un 16

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La producción de mandarina en la provincia de Huelva ha ascendido en los últimos diez años un 40 por ciento hasta las 135.000 toneladas, según el aforo previsto para esta próxima campaña desde la Asociación de Citricultores de la provincia de Huelva.

   Desde esta asociación han indicado a Europa Press que la provincia se ha convertido, con diferencia, en la primera productora de este fruto en Andalucía con el 51 por ciento del volumen, seguida por Almería con un 20 por ciento y por Sevilla con un 16.

   Este ascenso de debe fundamentalmente a las propicias condiciones de los cultivos onubenses para este fruto y por supuesto por la demanda del mercado y su valor en el mismo, lo que ha propiciado que en estos años los agricultores hayan recurrido al injerto de mandarinas para obtener esta variedad temprana, que ya se está recolectando.

   Respecto al pasado año, la producción de este fruto ha ascendido un diez por ciento y prevén una producción de 135.000 toneladas de mandarinas y una producción total de cítricos de unas 480.000, convirtiéndose Huelva en la segunda provincia andaluza, tras la de Sevilla que ha ascendido un 24,6 por ciento.

   En cuanto al destino de esta fruta, desde la asociación aseguran que el  70 por ciento se exporta principalmente a países europeos y el resto se consume en el mercado nacional. Sin embargo, en el caso de la mandarina se exporta el 80 por ciento de la producción total.

   Sobre la pasada campaña, aseguran que "no fue mala porque se pudieron cubrir coste de la producción", sin embargo la del año anterior "fue pésima" debido a las inclemencias del tiempo.

   Sin embargo de cara a la próxima campaña, que comenzó a finales de septiembre y que se prolongará hasta final de primavera, desde la asociación respiran "un ambiente positivo", aunque siempre mirando al cielo y a los precios para que se mantengan en unos niveles razonables.

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