La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha calificado como "un fallo humano que ocurre en determinadas ocasiones" el comunicado mediante al cual el Ministerio del Interior adelantó la última operación contra ETA antes de que se produjera. Además, ha elogiado el gesto del responsable de comunicación del Ministerio tras haber presentado su dimisión.
"Se cometió un fallo humano que hubiéramos deseado que no se hubiera producido. Esto ocurre en determinadas ocasiones y, en un gesto que hay que reconocer, el responsable ha presentado su dimisión", ha dicho.
Sobre el momento en el que se ha producido la operación, la vicepresidenta ha explicado que estos operativos "no se deciden ni se organizan de la noche a la mañana" y que requiere "un profundo análisis y estudio por parte de las fuerzas de seguridad además de una intervención judicial como la que se produjo en este caso". "La operación llevaba una preparación muy larga", ha sentenciado.
Ha recordado que la Fiscalía ha pedido informes, se le remitieron por parte de Interior y la Fiscalía ha archivado la investigación por lo que ha negado que se pueda comparar esta situación con el chivatazo a ETA del bar Faisán del año 2006.
Al ser preguntada por el hecho de que en el marco de esta investigación la Guardia Civil haya registrado el despacho de un senador de Bildu y sobre una posible ilegalización de la formación, Sáenz de Santamaría se ha limitado a decir que el registro de este despacho se ha realizado con autorización judicial y que no afecta a su condición de senador.
