Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a un varón de 60 años con numerosos antecedentes policiales por hechos similares, tras haber manipulado un sistema de localización para quebrantar la orden de alejamiento que pesaba sobre él ya que había sido acusado por unos malos tratos a su exmujer. El detenido se aproximó a la vivienda de su expareja a una distancia menor de 500 metros.
Según ha informado el Cuerpo Nacional de Policía en un comunicado, tuvieron constancia de los hechos cuando recibieron a través de la Sala del 091 una llamada del Centro Cometa, desde donde les alertaron de que un dispositivo de GPS que tenía asignado un varón, mediante una pulsera de localización, estaba siendo manipulado. Asimismo, indicaron que el portador de la misma se estaba aproximando a la vivienda de su exmujer, víctima de malos tratos en el ámbito familiar.
Así, una dotación policial se desplazó hasta el domicilio de la víctima, la cual les manifestó que había podido visionar a su exmarido a través de la ventana en un par de ocasiones, vistiendo de distinta maneras para no ser reconocido por los agentes. Los policías, tras realizar varias batidas por la zona e intentar localizar a esta persona, lograron detenerlo y fue trasladado hasta dependencias policiales.
Posteriormente, ha sido puesto a disposición de las autoridades judiciales competentes en funciones de guardia de Granada. La intervención policial fue llevada a cabo por agentes pertenecientes al Grupo de Atención al Ciudadano de la Comisaría Provincial de Granada.