“Puedo decir con total seguridad que no se va a poner un ladrillo en Pinar de Hierro”. El alcalde de la ciudad, Ernesto Marín, ha asegurado con estas palabras que el proyecto de urbanización previsto para este espacio verde, donde se contemplaba la construcción de 217 chalés, no se llevará finalmente a cabo.
Aunque no quiso dar demasiados detalles de cómo se ha puesto freno a esta actuación, el delegado municipal de Urbanismo, José Pedro Butrón, sí avanzó que los propietarios de este suelo urbanizable “se han dado cuenta de la imposibilidad de llevar a cabo la urbanización prevista” y están a punto de alcanzar un acuerdo con el Ayuntamiento.
Pese a que de momento no hay cerrado nada, Butrón adelantó que va a ser “un gran negocio para esta ciudad”. Según explicó el responsable municipal de Urbanismo, la empresa propietaria de Pinar de Hierro es la misma que la de los terrenos de Carboneros, donde también está previsto un proyecto de urbanización. Por lo pronto, la empresa ha solicitado la retirada del proyecto de reparcelación de Carboneros y eso, asegura Butrón, “tiene mucho que ver con la solución de Pinar de Hierro”. En este sentido, la solución podría pasar por ofrecerle un aumento de edificabilidad en Carboneros a cambio de Pinar de Hierro. El delegado de Urbanismo insistió en la necesidad de preservar este espacio verde, dado que es uno de los últimos grandes pinares costeros que quedan en la provincia de Cádiz.
