Los trabajadores de Cartuja Móvil, concesionario de Seat en Jerez, iniciaron ayer una serie de movilizaciones con el único objetivo de reclamar el cobro de sus salarios. Según los representantes de la plantilla, la empresa adeuda actualmente las nóminas de agosto y septiembre, a las que deben sumarse una paga de octubre y, presumiblemente, el salario del mes en curso.
Los problemas se vienen sucediendo en la empresa desde hace “cinco o seis años”, hasta el punto de que la sociedad se encuentra inmersa en un proceso concursal que, según los trabajadores, no está sirviendo para garantizar el cobro de sus salarios.
Además, la dirección de la empresa lleva algún tiempo “instando a los trabajadores a solicitar la baja voluntaria para, posteriormente, integrarse en una nueva sociedad”. Los empleados tienen muchas dudas sobre este proceso, que entre otras cosas les llevaría “a renunciar a las indemnizaciones por despido” y “empeoraría” sustancialmente sus condiciones laborales.
Al margen de esa pérdida de los derechos adquiridos, los empleados temen que los salarios pendientes de abono se queden en el limbo, así como las cantidades que corresponderían a las oportunas liquidaciones.
La situación afecta actualmente a 33 trabajadores, pero también lo ha hecho a otros compañeros de la empresa en distintos puntos de la provincia, donde se ha seguido el guión previsto para Jerez: cerrar una sociedad para reiniciar la actividad con otra nueva.
Al igual que hicieron en la mañana de ayer, los afectados piensan seguir concentrándose estos próximos días ante la sede de la empresa, en la avenida de Tío Pepe.