El consejero de Justicia e Interior, Emilio de Llera, ha asegurado hoy en Cádiz que han recibido "una orden directa de la presidenta de la Junta de ser implacables con la corrupción" una decisión que le alegra "extraordinariamente" porque considera que es necesario "erradicar ese fenómeno de la política".
"Yo cuando era fiscal era muy respetable y ahora resulta que empiezo a ser sospechoso por ser político. Eso no es justo", ha afirmado el responsable autonómico para quien los recientes casos de corrupción han "desacreditado a la política".
"Normalmente -ha añadido el consejero- la gente que entra en política se sacrifica por el deber con sus conciudadanos y tenemos que volver a dignificar la política y los políticos".
También ha considerado que "los ciudadanos tienen que ver que cuando hay alguien que se corrompe lo sacamos inmediatamente de la cesta".
El consejero, presente hoy en la capital gaditana para la inauguración del Foro Provincial de la Inmigración, también ha respondido a los periodistas sobre si esta orden de la presidenta andaluza afectará a los políticos imputados que siguen ejerciendo cargos públicos en la Junta.
De Llera ha afirmado a este respecto que "estamos muy mal educados" ya que "imputados hay miles" porque es la "única vía legal" que tiene un juez para recibir la declaración de una persona asistida por su abogado una vez que ha sido denunciada o querellada.
Si bien, para el titular de justicia, "ese no es un momento procesal para poder decir que debe ser expulsado".
Otra cosa diferente es, según su criterio, cuando ya se abre un juicio oral porque ya "sí hay una imputación judicial reflexionada" y una petición de condena.
Ha considerado "lógico" que el juez, mientras el caso se encuentre en fase de instrucción, mantenga la condición de imputados sobre las personas que están siendo investigadas.
