El mercante intervenido en marzo del año pasado en la zona del mar de Alborán, al sureste de Málaga, con varias toneladas de hachís a bordo, de nombre Mayak y con bandera de Sierra Leona, abandonó el puerto de la capital el 29 de diciembre sin ninguna comunicación previa y sin pagar la deuda que mantiene con la Autoridad Portuaria.
La Policía Portuaria fue la que se dio cuenta de que este buque, ahora de nombre Santa María y bajo bandera de Tanzania, había desaparecido de la trasera del muelle 9, donde estaba atracado. Ante esto, se alertó a la Guardia Civil y a Capitanía Marítima.
Revisando diversas grabaciones, se pudo comprobar que sobre las 23.00 horas del pasado día 29 los tripulantes cortaron amarras sin ayuda de prácticos ni amarradores y sin la autorización de Capitanía Marítima, han informado a Europa Press fuentes de la Autoridad Portuaria.
La deuda, que corresponde a atraques, prácticos y amarradores, será reclamada por la Autoridad Portuaria, que ha precisado que es la primera vez que sucede un hecho de estas características en el puerto malagueño.
EN ORÁN
Según el sistema de identificación automática por satélite, el buque se encontraba este pasado miércoles en las inmediaciones de Orán (Argelia).
Este mercante fue interceptado en la madrugada del 16 de marzo de 2014 por el buque de operaciones especiales Fulmar del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA), adscrito a la Agencia Tributaria, cargado con unas 12 toneladas de hachís. En la operación fueron detenidos los ocho tripulantes, todos ellos de nacionalidad siria.
