Además, otras dos personas murieron y diez resultaron heridas por el estallido de dos coches-bomba en las cercanías de una mezquita chií en el noroeste de Bagdad, informaron fuentes policiales.
Esta cadena de atentados coincide con un resurgimiento de la violencia en el país árabe en las últimas semanas que se ha cobrado las vidas de decenas de iraquíes. Asimismo, coincide con la importante detención por parte de las fuerzas de seguridad iraquíes del máximo líder de Al Qaeda en Irak, Abu Omar al Bagdadi.