El municipio sevillano de Coria del Río, estrechamente vinculado a Japón al recibir hace cuatro siglos la llegada de la expedición a Europa liderada por el samurai Hasekura Tsunenaga, ha celebrado este miércoles un homenaje a las víctimas y damnificados del terremoto y el tsunami que sacudieron la costa del Pacífico del país nipón el 11 de marzo de 2011.
¡Ánimo, Tohoku! ¡Ánimo, Japón!. Es el nombre que reciben las actividades de homenaje a las víctimas del terremoto y tsunami en su cuarto aniversario. A las 6 de la mañana, el municipio ribereño celebraba una conexión directa en el salón de plenos del Ayuntamiento, con Roma (Italia) y las ciudades niponas de Ishinomaki, Hiroshima, Miyagi e Iwate. Después, en el monumento a Hasekura Tsunenaga situado en el paseo Carlos de Mesa, que representa el vínculo de Coria con Japón, se ha celebrado una ofrenda floral con la participación de centros educativos locales.
La relación de Coria del Río con Japón es conocida. Una historia conjunta que se hace especial, estrecha, con la ciudad de Sendai, cuna del embajador que encabezaba la Embajada Keicho que llegó a tierras corianas hace 400 años: el samurái Hasekura Tsunenaga. También con la ciudad de Ishinomaki, de donde zarpó aquella expedición en su viaje a España.
Los actos contaron con la presencia de autoridades corianas, caso del alcalde de Coria del Río, Modesto González, y del Cónsul Honorario de Japón en Sevilla, José Japón Sevilla. Roma se convierte en esta ocasión en el centro del homenaje, debido a que se cumple el cuarto centenario de la llegada a la capital italiana de la Embajada Keicho, en 1615.
"La relación histórica que Coria del Río y el pueblo japonés mantienen desde hace cuatro siglos tuvo un luctuoso refrendo hace cuatro años", manifiesta el alcalde coriano. Para Modesto González, "no se trata tan solo de hacer memoria, de traer al recuerdo a las víctimas de aquella desgraciada catástrofe, sino también de subrayar de nuevo que aquí está el pueblo coriano para mostrar toda la solidaridad y el apoyo posible hacia un pueblo hermano que dejó, entre otros legados, a varios cientos de vecinos que llevan como apellido el nombre del país del sol naciente: Japón".
