El Servicio Marítimo de la Guardia Civil ha reforzado sus medios para combatir el tráfico de droga e inmigración ilegal en la Costa granadina con la incorporación de una nueva patrullera, una embarcación rápida denominada S-24, que se podrá utilizar para llegar rápidamente a puntos lejanos.
La nueva patrullera, que contará con una tripulación compuesta por tres agentes dada su facilidad para maniobrar y su rapidez en la puesta en marcha, está catalogada como una embarcación rápida y ha sido fabricada totalmente en aluminio por el Grupo Auxiliar Naval del Principado de Asturias 'Armon', lo que facilita un mejor asiento en el mar que otras embarcaciones similares fabricadas con fibra.
Tiene 10,45 metros de eslora y 3,5 metros de manga y está equipada con dos motores de cuatro tiempos de gasolina de gran cilindrada que rinden a 300 caballos de potencia, optimizado para reducir el consumo de combustible para que sean más respetuosos con el medio ambiente y podrá realizar sus funciones tanto en aguas interiores como en el mar territorial hasta doce millas náuticas aunque en caso de necesidad también puede realizar travesías de más 18 horas y participar en operaciones de búsqueda y localización de inmigrantes.
La adjudicación de esta nueva embarcación ha sido cofinanciada por el Fondo Europeo para las Fronteras Exteriores y el Gobierno de España dentro del Programa Solidaridad y Gestión de Flujos Migratorios de la Agencia Frontex de la Unión Europea.