El Tesoro Público ha logrado esquivar la crisis griega al colocar 4.174 millones en dos subastas de bonos y obligaciones, aunque ha tenido que subir los tipos en las referencias que ya había emitido anteriormente.
El organismo ha colocado 3.587 millones en una subasta ordinaria de bonos y obligaciones a 3, 5 y 10 años, y 587 millones en una subasta de bonos a 15 años ligados a la inflación.
En concreto, el Tesoro ha emitido 934 millones en bonos con cupón del 3,75% y vencimiento a 31 de octubre de 2018. Las peticiones de los inversores sobre este bono han superado en 3 veces lo vendido y el tipo marginal se ha situado en el 0,706%.
Además, ha colocado 601 millones en bonos con cupón del 1,15% y vida hasta el 30 de julio de 2020, tras registrar unas peticiones que han superado en 4,6 veces lo vendido (1,5 veces en la anterior ocasión). El tipo marginal de este papel ha pasado del 1,257% de la última subasta al 1,305%.
El organismo ha vendido también 2.052 millones en obligaciones con cupón del 1,60% y vencimiento a 30 de abril de 2025. En este caso, la demanda ha superado en 1,8 veces lo emitido (3 veces en la anterior ocasión) y el tipo marginal ha pasado del 1,893% al 2,279%, de forma que ha vuelto a superar el umbral del 2%.
En la subasta ligada a la inflación, el Tesoro ha vendido 587 millones en obligaciones con cupón del 1,00% y vencimiento a 30 de noviembre de 2030. En este caso, la demanda ha superado en 2 veces lo vendido y el tipo marginal se ha situado en el 1,585%.
