Fue terminar la tercera jornada de las Carreras de Caballos cuando empezaron a llegar las primeras personas para pasar una buena noche en las tradicionales barbacoas que se celebran en la playa en vísperas de la Procesión Extraordinaria con motivo de la Coronación Canónica de Nuestra Señora de la Caridad. Pero esta vez fue distinto porque el frío restó ambiente y se palpó que había menos gente en en años anteriores.
Hubo reuniones de jóvenes, de mayores y familiares a lo largo de todo el litoral sanluqueño, aunque unas zonas estaban más ambientadas que otras. Muchos grupos buscaban situarse junto a la pared del acerado del Paseo Marítimo para evitar el frío y también el viento. Muchas personas utilizaron chalecos y las candelas eran el mejor calentador doméstico para soportar la bajada de temperatura.
Zonas como Las Piletas y La Jara estaban mucho más ambientada que otras como La Calzada y Bajo de Guía. Los filetes de pollo y de cerdo, el chorizo, el queso, las costillas, las pajarillas, las tortillas de patatas y las empanadas, así como otros productos, eran el acompañamiento gastronómico para pasar la noche.
Después tocaba recogida y eran la Policía Local y la Guardia Civil las que se encargaban de desalojar la playa a primeras horas de la mañana. Las máquinas de limpieza debían dejar el litoral listo para el habitual uso de los bañistas. Es el único día del año donde está permitido que se puedan hacer barbacoas enla playa.