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Cádiz

Empate... y gracias (1-1)

Un gol de Álvaro García maquilla el resultado, pero no el juego, de otro pésimo partido por parte del equipo amarillo.

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  • Decepción de Güiza y Álvaro -

Un gol de Álvaro García maquilla el resultado, pero no el juego, de otro pésimo partido por parte del Cádiz. De nuevo concediendo demasiadas facilidades atrás, los amarillos ven volar puntos del Carranza y continúan en esa mala racha que tanto le hace diferenciarse del equipo que comenzó la temporada liguera.

Además de la fragilidad atrás, el ataque no es que ande precisamente fino, por lo que si unimos ambas cosas a que el centro del campo tampoco carbura nos quedamos con un equipo que no juega ni de lejos como se espera.

Para recibir al CD San Roque del gaditano Juanito, Claudio Barragán optó por situar en el campo a un mediocentro netamente creativo. Abel Gómez y Alberto Quintana se repartían el timón del equipo, escoltados por Salvi y Kike Márquez en las bandas y quedando por delante Fran Machado y Güiza. En defensa, lo esperado, con Mantecón en la derecha y Tomás en la izquierda como compañeros de Servando y Josete.

Pese a la mayor calidad que se le supone al Cádiz CF y a la juventud y posibles nervios vistantes, el primero en pegar fue el equipo onubense. Y ahí apareció una mano salvadora de Cifuentes, que llegó a la base de su poste izquierdo. Sin embargo, de poco sirvió al final esa intervención porque en el saque de esquina llegó el 0-1. Chaco, de cabeza, batió al guardameta cadista, que se desespera en cada acción de ataque visitante al ver ante sí a una defensa que concede demasiadas facilidades.

Con tímidos disparos lejanos y muy desviados de Kike Márquez y Tomás, los amarillos intentaban poner en aprietos a Bocanegra, pero sin ningún éxito dada su falta de puntería.

Y entre este escaso bagaje ofensivo del Cádiz y su frágil defensa, el que pudo marcar de nuevo fue el equipo vistante. Tras otro par de remates a las manos de Cifuentes, Josete salvó el segundo gol. El central cadista desvió en la misma línea de meta un balón que se colaba tras haber superado al portero en su salida.  Esta acción terminó de desesperaar a un público más frío que de costumbre.

Güiza, el más activo en ataque, en ocasiones incluso tenía que que bajar al centro del campo a buscar el balón, harto de que no le llegara ningún pase en condiciones. El jerezano no tenía puntería, pero se dejaba el aliento en cada jugada. Suyos fueron dos remates consecutivos: el primero se estrelló en la defensa y el segundo, de volea, se perdió lejos de la portería.

El empeño del delantero por cargar con el equipo es encomiable, pero no suficiente para sacar los partidos adelante y sumar de tres en tres como debe hacer un líder.

Para colmo de males, Claudio retiró en el descanso a Quintana para dar entrada a Álvaro García, pero en la segunda parte se le rompió el centro del campo con dos sustituciones por lesión.

El cambio táctito había enviado a Mantecón al centro del campo y concedido a Salvi toda la banda derecha. Pero cuando el equipo parecía reaccionar de forma tímida se tuvo que retirar Fran Machado tras un fuerte golpe. Wilson Cuero entró en su lugar, pero poco más tarde Abel Gómez también se tuvo que marchar antes de tiempo por lesión, entrando en su lugar Lolo Plá. Es decir, que el Cádiz tenía en el campo a todo su arsenal ofensivo, pero ni por eso conseguía marcar.

Cuando la derrota parecía ya una realidad, Güiza bajó un balón con calidad para dejar a Álvaro García en posición de disparo. Chut y gol. Un puntito como mal menor en otro pésimo partido que desesperó a las gradas.

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