El candidato de Podemos a la Moncloa, Pablo Iglesias, ha empleado este miércoles su tono menos mitinero y más "calmado" para criticar a los que "gritan", "crispan" y se "enfadan" como forma de hacer política, al tiempo que ha avisado de que es seña de que sus "adversarios" se les "empieza a notar a todos los nervios últimamente".
"Nosotros vamos a seguir siendo muy firmes pero no necesitamos gritar y enfadarnos, ni crispar más la situación", ha asegurado Iglesias en el mitin que ha ofrecido en el aula magna de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de la Coruña, en el que ha mostrado su lado más 'íntimo' para erigir a Podemos como ejemplo de "calma".
Así, ha defendido que "para decir las cosas importantes no hay que gritar". "Se les empiezan a notar a todos los nervios últimamente como en un partido de fútbol al equipo que va perdiendo a final, que le han quitado jugadores y le han sacado tarjetas rojas y amarillas, porque tratan de recuperar en el último minuto lo que han ido perdiendo", ha afirmado.
También se ha referido a la intervención en el Congreso de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, cuando llamó "criminales" a los banqueros, y ha defendido que él vio a la entonces activista antidesahucios "firme y tranquila diciendo la verdad a la cara" y "siendo tierna y dulce con los más débiles".