El Ayuntamiento de Córdoba, encabezado por su alcaldesa, Isabel Ambrosio, ha rendido este viernes un homenaje junto a familiares en memoria de las dos compañeras agentes de la Policía Local María de los Ángeles García García y María Soledad Muñoz Navarro, que fallecieron tiroteadas en acto de servicio el día 18 de diciembre del año 1996 tras un atraco a un banco.
En este sentido, la alcaldesa, junto a otros ediles de la Corporación Municipal, y las familias han guardado minuto de silencio y han depositado distintos ramos de flores en el monolito junto a los Llanos del Pretorio.
Al respecto, el edil de Seguridad, Emilio Aumente, ha relatado que tiene un recuerdo "bastante profundo" sobre los hechos, dado que se encontraba trabajando como funcionario en el Ayuntamiento y "fue un auténtico desastre lo que se vivió desde por la mañana temprano", de modo que "con el asesinato de las dos compañeras fue un día muy triste", ha lamentado.
A su juicio, esto debe servir para "valorar el trabajo que hace la Policía Local" y que "sirva de experiencia como la violencia no resuelve absolutamente nada, sino que crea un desastre familiar y todavía se ve en estos actos al cabo de tantos años".
Entretanto, ha destacado que "la plantilla de Policía Local continúa sintiendo ese día como un elemento fuerte dentro de lo que pasó a las compañeras y a todo el personal del cuerpo", a lo que ha añadido que "al nivel del Ayuntamiento fue un impacto muy imponente". Tras ello, ha resaltado que "el futuro ha deparado una Policía Local bastante buena con su ejercicio de profesionalidad bastante bueno".
Cabe recordar que el Ayuntamiento rindió homenaje este mismo día hace dos años en un acto emotivo en el que se entregó a título póstumo a las dos agentes la Cruz del Mérito Profesional, en su modalidad de primera categoría y con distintivo rojo, recogidas por el hermano de María Soledad y el hijo de María de los Ángeles. También estuvo presente en el acto el guardia de seguridad que resultó herido en el suceso, Manuel Castaño.
LOS HECHOS
En concreto, el suceso se registró sobre las 8,50 horas de un día como hoy hace 18 años a la altura de la Ermita del Pretorio, donde las dos agentes de la Policía Local fallecieron tras ser tiroteadas en una persecución a un turismo de color blanco. Las agentes perseguían a los dos autores de un atraco en una sucursal del Banco de Santander junto a la Plaza de las Tendillas, que se produjo sobre las 8,30 horas.
Minutos después, ya se registraron disparos a la altura de la calle Los Omeyas entre los atracadores y la Policía Local, donde hubo cuatro heridos, entre ellos el guardia jurado Manuel Castaño, que utilizaron como rehén.
Con posterioridad, el tiroteo continuó en la zona adyacente, a la altura de la Ermita del Petrorio, donde un coche de la Policía Local pretendía interceptar el turismo en el que huían los atracadores. En ese momento, uno de los atracadores descendió del vehículo y, de pie, junto al coche patrulla de la Policía Local, ametralló a los agentes a quemarropa.
De hecho, las dos agentes de la Policía Local cordobesa ni siquiera tuvieron tiempo de descender del coche patrulla.
