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Sanlúcar

Podemos analiza los datos del paro en la ciudad

Se pregunta cómo se puede mantener la población para subsistir

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Podemos Sanlúcar ha analizado los datos del paro publicados hace unos días en distintas fuentes y las circunstancias que rodean esta situación vital. Lamenta que Sanlúcar encabeza la lista de municipios gaditanos con mayor número de parados registrados, que no el real, 11.915 personas, “es decir, más de un 41% de nuestra población en edad de producir riqueza. Esta situación se ha venido prolongando desde el año 2010, en el que se llegó al 40% y seguimos en proceso ascendente. Las preguntas que nos asaltan de inmediato son: ¿Cómo se mantiene esta población para subsistir? ¿Si es esta la situación real, cómo se mantiene un nivel de paz social durante tanto tiempo? ¿Se ha hecho algo para paliar esta cifra? ¿Cuáles pueden ser las vías de solución a corto o medio plazo?”.

Resalta  que “las respuestas no son sencillas, ni a gusto de todos, pues se dan muchas variables a considerar. Parece que la población se ha acostumbrado a sobrevivir por varias vías, la más común es la percepción de subsidios temporales después de haber cotizado lo que marca la legislación vigente, bastante más restrictiva en condiciones y tiempo de cobro que en períodos anteriores, que llegan a agotarse en el tiempo y que suponen una angustia vital por el inevitable agotamiento de las prestaciones, si no se encuentra un nuevo empleo”.

Lamenta que otras muchas familias se han visto forzadas, bien por desahucios o por imposibilidad de pagar un alquiler, a instalarse en casa de padres o suegros que al menos les permiten compartir gastos corrientes. Incluso algunas familias que tenían familiares en residencias de ancianos han retomado sus cuidados con tal de ingresar la pensión correspondiente en la cuenta común del hogar: “Otras, simplemente son mantenidas con las exiguas pensiones de sus padres o suegros. O el más grave, a ocupar viviendas deshabitadas después del bluf de la burbuja inmobiliaria y recurrir a servicios sociales para el pago de las facturas de consumo vital (luz y agua) y de alimentación (suministros en bancos de alimentos o cheques “comida”)".

Hace constar que muchos jóvenes, sobre todo, han retomado los estudios, en especial de Formación Profesional, al no encontrar salidas remuneradas a su situación.

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