Los cocodrilos de agua salada son una especie en extinción en Australia. Sacarlos de su hábitat conlleva multas de hasta 77.000 dólares y cinco año de cárcel. Hacerlo en un colegio resulta todavía mucho más preocupante para las autoridades.
Este hecho ha sucedido en la zona norte del país, donde unas cámaras han cazado a unos infractores con tres cocodrilos que terminaban dentro de un colegio. Los llevaron en condiciones lamentables y los dejaron en el interior.
La situación, además de grave por los animales, que se encontraban fuera de su entorno y desnutridos, es peligrosa por las posibles consecuencias producidas en el colegio de haber sido encontrados por una persona sin preparación.
La policía ya está investigando los hechos para detener a los culpables y conocer de dónde han salido los cocodrilos, que presumiblemente han sido secuestrados de una granja donde son criados para mantener la especie viva.