El Gobierno local, tal y como había prometido la alcaldesa Mamen Sánchez el pasado mes de junio, se someterá a examen ciudadano en las próximas semanas a través de una serie de asambleas públicas en las que los vecinos podrán trasladarles directamente sus demandas y reivindicaciones tras superarse el primer año de gestión municipal.
En total se trata de seis asambleas ciudadanas de distrito abiertas que se celebrarán en el Jerez urbano y rural, presentadas ayer por el delegado de Participación, José Antonio Díaz, como “un nuevo modelo para fomentar la participación y la transparencia municipal”, que se suma a la iniciativa de los Consejos Territoriales y al programa 8 horas en tu barrio.
En estas seis asambleas ciudadanas, en horario de 18 a 21 horas, convocadas el 26 de septiembre en el centro Rosa Roige (Norte-Noroeste), 27 de septiembre en el centro Blas Infante (Centro-Este), 3 de octubre en el centro social de La Granja (zona Este), 4 de octubre en el Auditorio Polivante (Zona Sur), 5 de octubre Teatro de Guadalcacín y 6 de octubre en el centro cívico de San Isidro, podrán participar todos los ciudadanos a nivel individual, los representantes de las asociaciones vecinales, federaciones vecinales, alcaldes pedáneos y los delegados de alcaldía de las barriadas rurales.
Los temas y consultas que se abordarán en las asambleas deberán comunicarse vía registro o a través de la web municipal (la asociaciones de vecinos recibirán un formulario) y en el caso de las pedanías y barriadas rurales, contactando también con la Delegación de Medio Rural, antes del 20 de septiembre.
“Es una nueva forma de hacer política, una relación directa entre el Gobierno municipal y la ciudadanía”. Además, todos los miembros del Gobierno municipal estarán presentes en estas asambleas “porque el objetivo es aclarar, responder y conocer todas necesidades y solucionar los problemas de la ciudadanía”, resumía ayer José Antonio Díaz.
Estas asambleas “son un compromiso del Gobierno con los ciudadanos y un modelo de retroalimentación”, dijo Díaz, para “conocer las necesidades de cada uno de los distritos y dar cuenta de lo que se está haciendo de manera que conozcan las demandas prioritarias”.
Este modelo de participación “permitirá al Gobierno municipal tener un mejor conocimiento de las demandas, ya que será un caudal de información que nos permitirá perfeccionar nuestra tarea diaria y nuestro compromiso de gobierno con la ciudad”, apostilló la delegada de Medio Rural, Carmen Collado.
“No hay ciudadanos de primera ni de segunda”
Según José Antonio Díaz, la importancia de este modelo participativo radica también en que “no va va a haber ciudadanos de primera ni de segunda, porque las asambleas se van a celebrar tanto en el Jerez urbano como rural”.
“Es un compromiso de la alcaldesa, y estoy muy satisfecha porque todo el Gobierno municipal va a ir a la zona rural, que ha estado muy abandonada y dejado de ser oída”, recalcaba ayer Carmen Collado. “Ya hemos hecho asambleas en las barriadas rurales pero ahora éstas van a tener una importancia mayor porque se va a oír a todos juntos: vecinos, federaciones, representantes de la ELAs, porque no todas las necesidades de este amplio término son las mismas; hay que escuchar a todos y tomar buena nota”, matizó Collado.
Una promesa electoral
El origen de esta iniciativa aparecía recogido en el programa electoral de Mamen Sánchez para las municipales de 2015. Su idea era la de celebrar una asamblea pública anual, al cumplir cada año de mandato, para que los ciudadanos evaluaran y compartieran sus demandas de forma directa con el ejecutivo local. Finalmente serán seis asambleas al año y aunque la idea era celebrarlas en el mes de junio, en esta ocasión se ha optado por trasladarlas a septiembre.
