Ya decía el cantautor cubano Silvio Rodríguez, en ‘La busca de un sueño’, que “en busca de un sueño se acerca este joven, en busca de un sueño van generaciones. En busca de un sueño hermoso y rebelde, en busca de un sueño que gana y que pierde”. Así es el sentir muchas jóvenes que desde pequeñas juegan al fútbol, ese deporte siempre calificado como de hombres, y tienen que aguantar provocaciones, desprecios y burlas, por no hablar de insultos. Precisamente el pasado 25 de noviembre se celebró el Día Internacional contra la Violencia de Género, una jornada que todavía, en pleno siglo XXI, se debe celebrar y que no termina de erradicarse en la sociedad española.
Para hablar de ello, y de otros temas de actualidad en la capital, protagonizaron la tertulia ‘Ellas Son la Élite’, que organiza Viva Huelva en la céntrica taberna Guatiné, situada en la calle Miguel Redondo, la primera teniente de alcalde de Cultura, Turismo y Promoción de Huelva en el exterior, Elena Tobar, el entrenador del Fundación Cajasol Sporting, y las jugadoras del club onubense Ana Hernández y Sara Serrat.
No a la violencia
En el mundo del fútbol a niveles internacionales se ha luchado por eso del ‘fair play’ y para erradicar el racismo de los estadios. Sin embargo, todavía no se han llegado a introducir medidas para eliminar la violencia sexista de los campos españoles y que sean sancionadas estas conductas, como sí lo hacen por cánticos de la grada a ciertos jugadores o clubes de fútbol.
Sara Serrat, portera del Sporting, relató una historia estremecedora que se repite a lo largo del tiempo.
“Normalmente nuestro equipo juega cada cierto tiempo contra cadetes y juveniles hombres y más de una vez hemos tenido problemas, llegando a tener que parar el partido. Escuchamos comentarios de padres y de niños para llevarse las manos a la cabeza. A veces ganan ellos y otras nosotras, y cuando vamos por delante en el marcador parece que está mal visto, incluso en madres que sueltan por la boca comentarios totalmente fuera de lugar. Todavía no aceptan chicos perder contra chicas”, comentó Serrat, quien remarcó que ha escuchado comentarios de madres de jóvenes de 14 y 15 años como “cógedles el culo y las tetas a las niñas”. Ya este diario adelantó hace varias semanas unos insultos de un entrenador de categorías base a una jugadora del equipo de Los Rosales, un club de barrio de la capital.
Y no solo Sara Serrat ha vivido comentarios que evidencian el camino por recorrer que todavía le queda a esta sociedad en términos de igualdad de género. Ana Hernández, capitana del Sporting, insistió en que le han llamado “machorra”, pero que, aún así, “no me quitaron las ganas de jugar al fútbol y dedicarme a lo que verdaderamente me gusta. Son cosas muy tristes y que viví en mi pueblo de Sevilla. Los padres son los que deben inculcar desde muy pequeñitos que las mujeres y los hombres pueden jugar igualmente a la pelota y a las muñecas”.
Así, la primera teniente de alcalde de Huelva, Elena Tobar, estimó que para acabar con esta lacra se requiere de “una lucha conjunta y de la involucración de todas las partes involucradas. Desde los padres, madres, niños, profesores hasta empresas públicas, que deben desarrollar acciones conjuntas y transversales. Hasta que no tengamos conocimientos y pongamos medidas firmes en todos los ámbitos, seguiremos soportando cosas como estas”. De hecho, la violencia sexista no solo existe en el mundo del fútbol sino en otros muchos entornos, como el de la política. Tobar explicó que “empecé a trabajar muy joven en la actividad política y sumado a que soy mujer he tenido que luchar, demostrar y trabajar mucho más que otros compañeros”.
Por suerte, ahora puede decir que es la única teniente de alcalde de toda Andalucía y de las pocas que hay en España, algo que le “enorgullece”, ya que “tenemos a un alcalde -Gabriel Cruz- convencido de los temas de igualdad y que aplica políticas muy transversales sobre esto en todas las concejalías. Desde el año 2001 no se remodelaba el Plan de Igualdad, parecía un libro obsoleto que no tenía acciones concretas y sin la implicación de las administraciones y de la sociedad, y se está trabajando en que esté dicho plan en cuanto antes. Por ejemplo, en el Área de Cultura del Ayuntamiento hemos desarrollado el primer festival de cine hecho únicamente por mujeres”.
Abrumadores proyectos municipales para visibilizar a la mujer en cargos públicos. Por su parte, el Sporting, con una cartera de más de 200 niñas en la cantera, defiende “la igualdad para que no pasen los episodios que han tenido que sufrir las mujeres en Huelva. Aparte de los éxitos deportivos de un primer equipo a nivel nacional, el Sporting cuenta con ocho equipos de cantera. Desde benjamines hasta mayores para que ninguna chica se quede sin jugar al fútbol en Huelva”, expuso el técnico Antonio Toledo.
Un año que dará que hablar
Huelva será Capital Española de la Gastronomía en 2017. A pocas semanas del cambio de año, Elena Tobar, ilusionada y casi emocionada, comentó que “es la primera vez que Huelva es capital en algo. Lo veo como una oportunidad para que la ciudad crezca y el programa de actividades -que todavía no se ha anunciado- no solo va a encaminado a la gastronomía y a poner en valor nuestros productos, sino en actividades transversales que puedan quedarse en la ciudad de forma permanente. El programa que le presentamos al jurado es ambicioso y realista. Desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2017 Huelva y la provincia estarán repletas de actividades”. Esto supondrá “una promoción de nuestra cultura nunca vista antes. Ya nos llaman medios de comunicación de muchas partes del mundo”. n
