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La estrella en el paseo de la Fama, epicentro del culto

La estrella de Michael Jackson en el Paseo de la Fama de Hollywood fue ayer el centro del primer homenaje oficial rendido al difunto rey del pop en Los Ángeles, una baldosa con su nombre convertida ya en epicentro mundial del culto al artista.

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  • La estrella de Michael Jackson en el Paseo de la Fama de Los Ángeles se llenó ayer de ofrendas en su honor. -
La estrella de Michael Jackson en el Paseo de la Fama de Hollywood fue ayer el centro del primer homenaje oficial rendido al difunto rey del pop en Los Ángeles, una baldosa con su nombre convertida ya en epicentro mundial del culto al artista.

A las 09.00 hora local (16.00 GMT) la Cámara de Comercio de Hollywood, entidad gestora del mantenimiento del conocido paseo y del cartel de Hollywood, depositaba una corona de flores con el nombre del cantante junto a su estrella, donde de madrugada habían comenzado a llegar todo tipo de mensajes y recuerdos.

Los seguidores de Michael Jackson, aún conmocionados por la repentina muerte del astro del pop, fueron acercándose poco a poco al lugar para presentar sus respetos al ídolo desaparecido, si bien fueron superados en número por un sinfín de periodistas congregados allí para dar detalle de lo que ocurría.

“Estoy increíblemente triste y tenía que hacer algo”, dijo a Efe Tara Fontana, una madre de familia que acudió con su hija pequeña hasta Hollywood Boulevard para depositar un ramo de flores y un cartel en el que se leía: “Michael gracias por los grandes recuerdos, te echaremos de menos”.

Una docena de velas encendidas flanqueaban la estrella de Jackson, casi oculta por los diversos objetos llevados por los fans, entre ellos, peluches, cruces, fotografías, retratos o incluso algún que otro disco de vinilo grabado por el artista en los comienzos de su carrera.

Alguien había dejado un barco pirata de juguete de la producción Peter Pan con un texto manuscrito en la vela de la pequeña nave que decía: “Michael aquí está Peter Pan para llevarte al País de Nunca Jamás (Neverland –en inglés–, igual que el nombre de su rancho).

Apenas un puñado de seguidores resistían la presión de los reporteros y conseguían hacer un círculo alrededor del baldosín que cada vez iba recordando más a una tumba con el nombre de Jackson, en cuyo centro se colocó un anillo con el símbolo de un tocadiscos.

Las emociones y algunos llantos se alternaban con cánticos improvisados de temas que convirtieron en mito al rey del pop, cuya música “estará siempre en nuestros corazones”, como rezaba otro letrero.

“Él es la razón de que me gusten tantos géneros distintos de música. Él cambió el mundo para mí. Mi padre solía ponernos la cinta de vídeo de (la canción) Thriller cuando éramos pequeños y lo veíamos por semanas”, aseguró Alex Martínez, un seguidor latino.

Martínez dijo convencido que “una parte de Hollywood se fue con él cuando murió”.

En el río revuelto en el que se convirtió ayer el Paseo de la Fama no faltaron quienes intentaron rentabilizar el luto por Michael Jackson e intentaban vender a los turistas camisetas conmemorativas con la imagen del rey del pop a 20 dólares (14,2 euros), mientras trataban de esquivar a la Policía al no tener licencia para la venta ambulante.

La inesperada noticia de su muerte fue suficiente para volver a llevar a Jackson al primer lugar de las listas de ventas a través de internet con discos como el recopilatorio The Essential Michael Jackson, Thriller, que es el álbum más vendido de la historia de la música, y Off The Wall.

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