La segunda ronda de negociaciones sobre Siria que arrancan mañana en Astaná servirá para crear un mecanismo de supervisión del alto el fuego que rige en el país árabe, anunció hoy el ministro de Asuntos Exteriores kazajo, Kairat Abdarajmánov.
Los países garantes del alto el fuego en vigor desde el 30 de diciembre "tienen intención de crear un grupo operativo para la supervisión del régimen del cese de hostilidades", aseguró Abdarajmánov a los periodistas.
El mecanismo de supervisión contemplará un régimen de sanciones para las partes que violen el alto el fuego.
"Cuanto más se amplíe el ámbito de aplicación de la tregua, más posibilidades habrá de que la paz, estabilidad y el orden se restablezcan en el territorio de Siria", subrayó el titular de la diplomacia kazaja.
La nueva ronda de negociaciones entre el Gobierno de Damasco y los grupos opositores armados en la capital kazaja también contarán con la participación de los tres países garantes del alto el fuego (Rusia, Turquía e Irán), Jordania y la ONU.
La delegación del Gobierno sirio estará encabezada por Bashar Jafaari, mientras se espera que la oposición armada confirme en las próximas horas tanto su asistencia como la composición de su delegación.
La cita en la capital kazaja servirá de preludio a la reanudación de conversaciones de paz entre una delegación gubernamental siria y otra de la oposición en Ginebra a partir del próximo día 20.