El Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de Gibraleón (Huelva), gobernado por la socialista Lourdes Martín, ha alertado de las "sospechas" que han levantado varios procesos de contratación de personal en el Ayuntamiento debido a los "arbitrarios" criterios establecidos en estos procedimientos y la coincidencia de estos criterios con los perfiles de determinados aspirantes.
Según expone el PP en una nota, el pasado 9 de marzo el Ayuntamiento de Gibraleón publicaba las bases para la convocatoria de una plaza de encargado de obras (personal laboral fijo), cuyo sistema de selección es el de oposición y las pruebas a realizar por los aspirantes consisten en una prueba tipo test, una prueba práctica y una entrevista.
Con posterioridad, el 25 de abril, el Ayuntamiento también publicó las bases para la convocatoria de dos plazas de arquitecto (funcionario), cuyo sistema de selección es el concurso-oposición y las pruebas a realizar son una prueba tipo test y una prueba práctica. Los populares han recordado que estas plazas convocadas están, actualmente, ocupadas por personal interino.
Para el PP de Gibraleón, "en estos procesos selectivos no se garantiza la libre concurrencia pues, concretamente en las dos plazas de arquitecto, los méritos a valorar en la fase de concurso son tan concretos y tan coincidentes con el currículum de determinadas personas que no es difícil aventurar quiénes serán los probables destinatarios finales de las plazas en propiedad debido a lo arbitrario de esta fase y a la manipulación de los criterios a valorar por parte del equipo de gobierno".
Los populares, igualmente, han subrayado que, sin embargo, "en la convocatoria de la plaza de encargado de obras se opta por el sistema de oposición, no valorándose los méritos y capacidades de los aspirantes". En este sentido, los populares sospechan del establecimiento de diferentes criterios en las convocatorias "para burlar los principios de igualdad, mérito y capacidad y hacer, presuntamente, trajes a medida para conocidos, amigos y afines a la alcaldesa".
Así, han indicado que "no se garantiza la adecuación de las personas a las necesidades de los puestos, sino a las necesidades de los gobernantes, no existiendo la imparcialidad y la igualdad real de oportunidades". Además, han subrayado que estas plazas "son definitivas y en propiedad".