Dos hermanos de 37 y 31 años han sido condenados por la Audiencia Provincial de Málaga a un total de veintiocho años y medio de prisión por el homicidio de un hombre en un cortijo de la localidad malagueña de Antequera, ocurrido en noviembre de 2015.
La sentencia considera probado que el 31 de octubre de 2015 se produjo en el municipio de Cuevas Bajas un altercado durante el que uno de los acusados amenazó "reiteradamente" a la víctima.
El mismo día, horas más tarde, el otro acusado fue agredido por varias personas, por lo que formuló una denuncia en la que manifestaba que creía que uno de sus agresores era quien después sería la víctima del homicidio.
El 7 de noviembre, los dos hermanos se presentaron armados con una escopeta en el cortijo "Las Hazuelas" de Antequera, donde vivía y trabajaba la víctima.
Como no les permitieron la entrada, uno de los hermanos "la emprendió a golpes con la puerta hasta sacarla de sus goznes y derribarla".
Una vez dentro, efectuaron un primer disparo contra la víctima que no le alcanzó de lleno, por lo que pudo salir corriendo perseguido por los acusados.
Un segundo disparo no le alcanzó y el tercero le hirió en la pierna cuando ya había caído al suelo, lo que fue aprovechado por uno de los hermanos para golpearle reiteradamente en la cabeza y otras partes del cuerpo con la culata de la escopeta hasta llegar a romperla.
A continuación, los dos hermanos se dieron a la fuga, y la víctima falleció por un traumatismo craneoencefálico a causa de la agresión.
Uno de los hermanos ha sido condenado a trece años de prisión por un delito de homicidio con la agravante de abuso de superioridad, y el otro a catorce años de prisión por un delito de allanamiento de morada en concurso medial con un delito de homicidio con la misma agravante.
Al segundo hermano se le condena además a dieciocho meses de prisión por tenencia de arma prohibida, y ambos deberán indemnizar a los tres hijos del fallecido con 200.000 euros y a la madre con 10.000 euros.