El piloto británico Lewis Hamilton (Mercedes), líder del Mundial de Fórmula Uno y tricampeón mundial, defenderá su liderato en el Gran Premio de Singapur de este domingo, territorio de su rival alemán Sebastian Vettel (Ferrari) que ha ganado en Marina Bay en cuatro ocasiones.
Lewis, que se hizo con la cabeza de la clasificación de pilotos gracias a una carrera perfecta hace once días en Monza - el hogar de los Ferrari vivió un doblete de los Mercedes de Hamilton y del finlandés Valtteri Bottas, primero y segundo- tiene una exigua ventaja de apenas tres puntos con su rival, el tetracampeón mundial alemán Vettel, quien tiene en Singapur una de sus pruebas fetiche.
El tricampeón de Stevenage, de 32 años, logró en Monza su 'pole position' número 69, lo que le permitió convertirse en el piloto de la historia con más triunfos a una vuelta y batir el registro del siete veces campeón mundial alemán Michael Schumacher, convaleciente de un accidente de esquí desde 2013.
Las dos victorias seguidas de Hamilton en Monza y Spa -ha ganado tres de los cuatro últimos Grandes Premios, si sumamos el triunfo en Silverstone- dan al británico la iniciativa en un circuito en el que ha ganado en dos ocasiones, en 2009 con McLaren y en 2014 con Mercedes.
El doble de victorias en Marina Bay -tres seguidas entre 2011 y 2013 con Red Bull y otra en 2015 con Ferrari- atesora un Vettel que aspira a recuperar la iniciativa en el Mundial, en una pista en la que, como todo circuito urbano, el manejo del piloto es fundamental, con 23 curvas y al menos una decena de ellas de 90 grados.
No en vano, Vettel es el piloto que más vueltas ha dado al circuito de Marina Bay como líder, 221 giros, casi el doble de los que ha sumado Hamilton (135).
Por detrás del duelo entre los líderes de Mercedes y Ferrari se sitúa el compañero de Hamilton, el finés Valtteri Bottas, que ha anunciado esta semana que continuará en 2018 como piloto de la escudería alemana.
El nórdico llegó este año procedente de Williams para cubrir el hueco dejado por el campeón del mundo alemán Nico Rosberg, y en lo que llevamos de temporada ha ganado dos carreras (Rusia y Austria) sumado 197 puntos y subido nueve veces al podio.
El australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), cuarto en el Mundial con 144 tantos y protagonista de la gran remontada de la carrera en Monza -pasó del decimosexto lugar de salida al cuarto final- buscará volver al podio en el que ha estado en seis de las trece pruebas de esta temporada.
Sumar puntos y estar lo más cerca posible del podio será el objetivo del finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari), y estabilizarse para el holandés Max Verstappen (Red Bull), después de dos carreras con problemas. El mexicano Sergio 'Checo' Pérez (Force India) espera seguir con su buena racha de sumar puntos en Marina Bay.
Diferente es la situación para el español Fernando Alonso (McLaren-Honda), que tan solo ha conseguido sumar en dos carreras esta temporada y tendrá difícil hacerlo en un trazado en el que es el tercer piloto con más victorias: dos, en la inaugural de 2008 con Renault y en 2010 con Ferrari.
El bicampeón del mundo español (en 2005 y 2006, con Renault), en su tercer año de travesía en el desierto con McLaren-Honda, conoció esta semana que la escudería inglesa cerró su relación con el fabricante de motores japonés y utilizará a partir del próximo año unidades de potencia de Renault, hasta 2020.
La noticia supone un giro a la relación de Alonso con McLaren, con la que apenas ha arañado tres quintos puestos como mejores resultados en tres temporadas para olvidar, especialmente la actual, en la que acumula cinco abandonos en once carreras -no corrió el GP de Mónaco por disputar las 500 Horas de Indianápolis y se quedó fuera del GP de Rusia antes de empezar por un fallo eléctrico-.
La llegada de un nuevo motorista podría acelerar su renovación con la escudería de Woking, aunque "de momento no hay nada nuevo", según dijeron a EFE fuentes del entorno del dos veces campeón del mundo asturiano.
El otro piloto español del 'paddock', Carlos Sainz (Toro Rosso) espera dejar a un lado el abandono de Monza y regresar a la senda de los puntos; mientras los rumores apuntan también a su futuro, que algunos sitúan en la escudería Renault aunque el madrileño dejó bien claro esta semana que su porvenir está "en manos de Red Bull".
El circuito urbano de Marina Bay, con sus 5,065 kilómetros a los que se darán 61 vueltas el domingo para completar 308,828 kilómetros o dos horas de prueba, recibirá a los pilotos en la décima edición del GP de Singapur con una elevada humedad del 70% y probabilidad de lluvia durante la tarde que podría afectar a la pista, en una zona caracterizada por la meteorología cambiante.
El fabricante de neumáticos italiano Pirelli ha elegido los compuestos ultrablando, superblando y blando para afrontar un circuito que no debería exigir mucho a los neumáticos, aunque sí a los frenos, en las estrechas curvas de Singapur.