Un día antes de partir hacia Canadá para disputar el Masters 1000 de Montreal, el tenista ha mantenido un encuentro con los periodistas en el que afirmó que no sabe “realmente” en qué nivel deportivo se encuentra, si bien ha asegurado que regresa al circuito porque está “mejor” y con el objetivo de “intentar dar lo mejor” y de “mejorar día a día”.
Según explicó, en los últimos cinco días entrenó “muy bien”, por lo que el lunes mismo tomó la decisión definitiva de regresar a la competición.
Aunque se siente recuperado de su lesión, Nadal puntualizó que se trata de un asunto “largo” con el que hay que convivir y que está “feliz” por cómo progresó su recuperación, aunque es “posible” que regrese al circuito en Montreal y vuelva el dolor.
“Soy consciente de que voy a Montreal y a Cincinnati a perder; es lo lógico”, dijo Nadal tras el obligado parón que el jugador de Manacor ha tenido que hacer.
“Tengo que saber dónde estoy para poder marcarme un objetivo real porque si los objetivos son irreales, te puedes pegar un tortazo”, advirtió.
Nadal declaró que su ilusión deportiva es continuar ganando torneos y dar “lo máximo” para estar “lo más arriba posible”, al tiempo que ha mantenido que no era más feliz cuando era número 1 del mundo.
Respecto a ser de nuevo el número 1 del mundo, Nadal respondió que nunca fue su objetivo, aunque le hizo “ilusión lograrlo”. “Mi objetivo –aclaró– es el de siempre: seguir mejorando y entrenar suficientemente bien y con la suficiente alegría para que me permita llegar con opciones a los grandes torneos para ganarlos”.
El tenista dijo sentirse “feliz” por volver a competir y que regresa con la misma ilusión de siempre tras pasar algo menos de dos meses realizando un tratamiento “duro” que le ocupaba más de cinco horas al día, aunque tuvo tiempo para disfrutar de su familia y sus amigos y también para “salir de fiesta” como cualquier otro joven de 23 años de su edad.