Fue precisamente un hermano de la víctima el que divisó el cuerpo hacia las 11.00 horas mientras buceaba participando junto con los GEAS de la Guardia Civil en el dispositivo de búsqueda.
Tras procederse al preceptivo levantamiento del cadáver, el cuerpo, que se encontraba con cierto grado de descomposición por haber permanecido en el agua todos estos días, fue trasladado al tanatorio de Los Pinos, donde hoy está previsto que se le practique la autopsia. Según fuentes del Instituto Armado consultadas por este diario, el joven no presentaba inicialmente signos de violencia que pudiesen señalar una agresión previa a la caída.
Ayer se supo igualmente que S.L.A., de 18 años, era natural de Ceuta, y que por ello, a pesar de tener ascendencia marroquí, tenía la nacionalidad española. Numerosos familiares del malogrado senderista se iban acercando durante la jornada de ayer al tanatorio algecireño para velar el cadáver.
Con este hallazgo se culminan cuatro jornadas de búsqueda en la que se ha puesto en marcha un importante despliegue de medios compuestos por patrulleras de la Guardia Civil, GEAS del propio Instituto Armado, las embarcaciones de Salvamento Marítimo Alkaid y Salvamar El Puntal, el remolcador Miguel de Cervantes, el avión Serviola 2 y durante el primer día el helicóptero, también de Salvamento Marítimo, Helimer 209. De igual modo, Protección Civil y Policía Local colaboraron, sobre todo en los primeros momentos.
El momento en que se dio a conocer la desaparición fue cuatro horas después de que se le viese precipitarse al mar, esto es, a las 17.00 horas del martes, activándose con ello el citado dispositivo.
Al día siguiente, hacia las 13.00 horas, el padre del joven, junto con el compañero que alertó de su desaparición, acudieron a la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta para denunciar el hecho.
La Guardia Civil mantenía ayer abiertas las investigaciones sin descartar ninguna hipótesis y a la espera de recabar más datos sobre las circunstancias en que se produjo el trágico desenlace.
