Zapatero hizo ese anuncio en su intervención en la fiesta minera organizada por UGT en la localidad leonesa de Rodiezmo, en la que contestó al PP que el Gobierno no improvisa en economía, sino que da respuesta a los problemas que van surgiendo.
En un acto que tradicionalmente se considera el inicio del curso político socialista, su secretario general dedicó toda su alocución a expresar su convencimiento de que España saldrá de la crisis, junto con el resto de países, y a reafirmar su compromiso con las políticas sociales en un momento como el actual.
“Tenéis mi palabra y mi compromiso de mantener la política social avanzada y la protección social”, reafirmó antes de poner como ejemplo que las pensiones mínimas ganarán poder adquisitivo el próximo año.
Desde que es presidente del Gobierno, siempre ha aprovechado el acto de Rodiezmo para avanzar un incremento especial de las pensiones mínimas en cada ejercicio, y, aunque en esta ocasión también lo hizo –ya que ha adelantado que el resto de pensiones mantendrán el poder adquisitivo–, no concretó el porcentaje de subida.
Fuentes socialistas precisaron posteriormente que no lo hizo porque, en un momento de especial dificultad económica, es un asunto que desea concretar con los sindicatos, al igual que el salario de los funcionarios.
En la misma línea de apuesta por las políticas sociales, anunció que el próximo año será en el que más se destine a becas para estudiantes y que se seguirá ayudando a los jóvenes para que dispongan de una vivienda y se avanzará en la ley de la Dependencia.
Zapatero aprovechó para insistir en su defensa de una ley de economía sostenible y en su deseo de que haya un gran acuerdo de Estado en dos cuestiones que considera clave: la educación y la energía.
Un acuerdo al que apeló directamente al PP esperando que “por una vez ponga algo de su voluntad y se siente a hablar en favor del interés general, en vez de criticar y descalificar, que es lo que –precisó– hace cada día el señor Rajoy”.
A las críticas populares, que le reprochan estar rectificando e improvisando en política económica, se refirió expresamente para asegurar que eso es “mentira”, ya que lo que hace el Gobierno es ir dando respuesta a los problemas que se van planteando.
Es lo que ha ocurrido, por ejemplo, con la decisión de que los parados sin ninguna prestación reciban 420 euros mensuales, comentó. “Sabemos donde vamos; eso es gobernar cerca de lo que pasa; no improvisamos, sino que estamos todo el día explorando posibilidades para luchar contra la crisis, apoyar a las empresas y escuchar a los trabajadores y a los sectores más afectados”, dijo Zapatero, quien aseguró que el Gobierno trabaja para encontrar nuevas medidas que faciliten a las empresas el acceso a los créditos bancarios.
Subrayó también que su proyecto quiere contar, ante todo, con los trabajadores y señaló que, en una situación difícil como la que se está viviendo, es cuando un Gobierno tiene que elegir, y el suyo lo ha hecho aumentando las prestaciones a los desempleados y rechazando medidas como abaratar el despido.
Zapatero agradeció la actitud “ejemplar” de los sindicatos y precisó que le habría gustado decir lo mismo de la de los empresarios.
El presidente del Gobierno lamentó que algunos, en alusión a los dirigentes del PP, se estén “frotando las manos” esperando que España empiece la recuperación económica más tarde que otros países europeos, lo que, dijo, no va a ocurrir porque la recuperación será simultánea.
A Rodiezmo asistieron, entre otros, la ministra de Igualdad, Bibiana Aído; la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín; o el presidente de la Fundación Pablo Iglesias, Alfonso Guerra.