Cientos de brasileños, en su mayoría estudiantes, se manifestaron hoy en algunas ciudades contra el presidente electo de su país, el ultraderechista Jair Bolsonaro, a quien exigieron que respete la democracia durante su mandato.
Pero las protestas de este martes fueron minoritarias en comparación con los miles de brasileños que salieron el domingo a las calles para celebrar la victoria de Bolsonaro, quien asumirá la presidencia el próximo 1 de enero.
En Río de Janeiro, la ciudad más emblemática de Brasil, más de 200 jóvenes marcharon hasta las escaleras de la Cámara Municipal con pancartas como "Tortura nunca más" o "Él nunca" y con gritos incendiarios contra Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura militar (1964-1985) y de su ideología.
Varios adolescentes acudieron inclusive con el uniforme de sus colegios y alertaron de que el gobernante electo "es muy malo para el país por el histórico y por la dictadura" que ya vivió Brasil.
Los participantes recorrieron las calles del centro carioca, invadiendo vías e incluso llegando a bloquear el tráfico en ocasiones, lo que generó algo de tensión con las autoridades, especialmente cuando algunos de los jóvenes se pelearon entre ellos, según pudo constatar Efe.
El grupo de jóvenes iba abanderado por una gran pancarta en la que se podía leer "Paz entre nosotros, guerra a los señores", además de otros mensajes como "Las debilidades te derribarán", en alusión a como Bolsonaro se refirió a su única hija mujer.
En Sao Paulo, la mayor ciudad del país, cientos de personas se concentraron en la céntrica Avenida Paulista para protestar igualmente contra el capitán en la reserva del Ejército, vencedor de las elecciones del pasado domingo con un 55 % de los votos.
La protesta, convocada por diferentes movimientos sociales, estudiantiles y sindicales, exigió al gobernante electo mantener los valores y libertades democráticas.
"Tengo mucho miedo de que haga las cosas que está hablando, espero que no haga eso y no cumpla sus palabras, pero nosotros vamos a continuar en la calle, manifestándonos porque es nuestro derecho y él tiene que entender a la oposición. Vivimos en una democracia", dijo a Efe Ranadi Ghazzaoui, estudiante de 19 años.
En su opinión, no cree que aquellos que optaron por votar a Bolsonaro sean "realmente fascistas", ni tengan sus ideas, pero cree que el ahora mandatario electo despertó "mucho odio entre las personas".
Por su parte, Pedro Henrique, estudiante de 18 años, demanda "un Brasil justo e igual para todos" en el que "las minorías sean respetadas y los progresos no sean alterados".
En este sentido, lo que le "deja con miedo" es el plano económico liberal de Bolsonaro ya que, a su juicio, "favorece principalmente a la parte más rica, a los empresarios".
"Creo que es importante que la izquierda se una en este momento y no acepte ningún retroceso", apuntó.
En la manifestación de Sao Paulo participó el excandidato presidencial y líder de los Sin Techo, Guilherme Boulos, quien hizo campaña junto con el progresista Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), rival de Bolsonaro en la segunda vuelta de los comicios.