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Sevilla

Turismo: La vanguardia de las Setas no alcanza a la Sevilla eterna

La Catedral de Sevilla recibe en un solo año más visitas que las recibidas por el Metropol Parasol en siete años

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  • Las Setas, el Metropol Parasol. -
  • El Real Alcázar capta más turistas en un ejercicio que el diseño de Mayer en cuatro
  • El Museo Taurino de la Maestranza logra desde 2015 más público que el Metropol Parasol

En sus primeros siete años en números redondos (2011-2017) las Setas de la Encarnación, presentadas por Alfredo Sánchez Monteseirín como si fueran el icono de la modernidad de Sevilla junto al rascacielos de la Cartuja, ha recibido del orden de dos millones de visitas, una cifra inferior a la que se registró en la Catedral sólo el año pasado. El templo metropolitano y el Real Alcázar baten de largo las cifras del Metropol Parasol que diseñó el arquitecto alemán Jürgen Mayer, al igual que desde hace tres años lo hace también otro exponente de la Sevilla tradicional, el Museo Taurino de la Real Maestranza de Caballería.

Según fuentes municipales, de los alrededor de dos millones de visitantes de las Setas en el septenio 2011-2017, la mitad fueron sevillanos y la otra mitad, turistas de paso por la ciudad. La tendencia observada es una cada vez menor afluencia de público nativo, ya que su interés decae una vez que sube al Metropol Parasol y también pasa el digamos “efecto novedad” tras su apertura.

Por el contrario, el número de turistas que aprovechan su estancia en Sevilla para darse una vuelta por la estructura diseñada por Jürgen Mayer en la Plaza de la Encarnación se va incrementando gradualmente, como consecuencia también del ‘boom’ turístico que vive la ciudad en los últimos años, pero sin parangón con el poder de atracción que tienen los grandes monumentos simbólicos de Sevilla desde siempre, la Catedral y el Alcázar.

Así, en el cuatrienio 2014-2017 el número de sevillanos que subieron al mirador de las Setas fue de 401.927 (el 36,25% del total), mientras que el de turistas ascendió a 707.000 (el 63,75%). A pesar de que para los nativos la visita a los Parasoles es gratuita, la subida de sevillanos a las Setas pasó de 126.000 en el año 2014 a 87.000 en 2017, una caída del 31%.

El número de visitantes al Metropol Parasol incluso ha disminuido en el último periodo según los datos disponibles, ya que en el año 2014 se registraron un total de 286.000 entre sevillanos y turistas y en 2017 la cifra global bajó a 281.000.

Catedral y Alcázar

Por el contrario, el número de visitantes a los dos grandes monumentos representativos de la ciudad y declarados por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, la Catedral y el Alcázar, no ha dejado de aumentar año tras año en el mismo periodo de tiempo, con incrementos de hasta el 17,64% en el templo metropolitano (2017) y de hasta el 14,66% en el palacio real en uso más antiguo de Europa (año 2015). Sólo en 2018 acudieron a la Catedral más visitantes que en siete años a las Setas.

Si se compara la evolución del número de visitas de cada monumento, los 281.000 registrados en el Metropol Parasol fueron 5.000 menos que en 2014, mientras que el Alcázar pasó de 1.325.854 a 1.799.465 (473.611 más) y la Catedral, de 1.434.444 a 1.934.373 (499.929 más).

Es la demostración de que el poder de atracción de la Sevilla tradicional es muy superior al de la supuestamente vanguardista que al coste de al menos 120 millones de euros representarían las Setas de la Encarnación.

Y ya no se trata sólo de esos dos monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad. Otro exponente de la Sevilla de siempre, el Museo Taurino de la Real Maestranza de Caballería, supera en cada vez mayor número los visitantes de las Setas desde el año 2015: 325.173 frente a 281.000 en 2017.

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