Con el título de ‘Historia del colegio Nuestra Señora de las Nieves (1669-2019)’, el próximo 4 de octubre verá la luz un esperado libro que recoge la obra educativa de uno de los centros más señeros de Arcos de la Frontera. Su autor no es otro que el director del propio colegio, Antonio Domingo Gómez, quien viene investigando y recopilando datos y testimonios durante los últimos años.
Publicar un libro como éste no deja de ser una prueba de amor hacia su centro, hacia el colegio que hoy por hoy dirige…
–La historia del colegio Las Nieves no se entiende de manera aislada sin el contexto educativo de la ciudad. Por tal razón, este estudio desborda los límites de nuestro centro, puesto que su lectura descubre al lector cómo era el mundo educativo de nuestra localidad en el siglo XIX y primera parte del XX, cuántas escuelas unitarias había en Arcos, dónde estaban ubicadas, quiénes eran los maestros, qué se enseñaba en ellas, qué problemas se encontraban en su quehacer diario, cuánto cobraban, qué inventario había una clase, cuántos alumnos había en cada una de ellas, etc.
No he escatimado en nada, de ahí las 432 páginas de este primer tomo, el cual no se hace pesado porque está aderezado de anécdotas y curiosidades. Funciona como obra de lectura lineal pero también como fuente de consulta. Podemos encontrar documentos significativos escaneados, fotografías, tablas, ilustraciones, etc. Casi 120 páginas son a color, en papel estucado de calidad de 130 gramos. con un tamaño A4, grande, así lo he querido para poder disfrutar mejor de todo este material gráfico.
Aunque la obra es extensa y prolija en cuanto a la historia del centro, las anécdotas, sus hechos más relevantes… ¿Cómo resumiría el devenir del colegio y, por tanto, la obra que ahora nos presenta?
–El colegio tiene su origen en las donaciones que Ana de Trujillo y Diego de Virués realizaron a la Compañía de Jesús para establecer aquí escuelas públicas a mediados del siglo XVII. Tras la expulsión de los jesuitas en 1767, el colegio siguió funcionando como ‘Casa de las escuelas’ hasta que el inmueble fue cedido a los padres mercedarios en 1785. En esa etapa estuvo alojada en nuestro centro la imagen de la patrona de Arcos, Nuestra Señora de las Nieves, de donde toma su nombre el actual colegio. Por Real Orden, en 1837, en el edificio volvieron a instalarse escuelas públicas, que han funcionado ininterrumpidamente hasta el día de hoy, aunque con las lógicas transformaciones dictadas por el devenir de los tiempos.
¿Cuál diría que ha sido la aportación del colegio Nuestra Señora de las Nieves a la educación en Arcos? Por lo pronto, en él se han formado profesores que han enseñado a decenas de generaciones de alumnos y alumnas...
–Sin duda alguna, la aportación más importante fue la creación del colegio de Segunda Enseñanza, que permitió a muchas generaciones de estudiantes, a falta de instituto en Arcos, poder continuar los estudios al acabar la etapa primaria. Este colegio fue fundado en 1867 por el Deán Espinosa y Don Pedro Moreno Rodríguez, el único ministro nacido en Arcos hasta el día de hoy. La trayectoria del colegio finalizó en 1967, puesto que al año siguiente abrió sus puertas el instituto Miguel Mancheño. Este colegio de Segunda Enseñanza vivió momentos de verdadero esplendor. Tal era la importancia que se le otorgaba, que para celebrar cada comienzo de curso, a principios del siglo XX, se llevaba a cabo un acto en el Teatro de la Unión (actual Olivares Veas) al que se desplazaba un cortejo bajo mazas que salía del Ayuntamiento, formado por el alcalde, concejales, profesores y las más destacadas personalidades de la sociedad arcense. Los discursos dictados en cada acto se recopilaban en unos cuadernos que publicaba la imprenta de los hermanos Caro.
Seguramente el colegio disfrutó de épocas más gloriosas desde el punto de vista del número de alumnos y profesores, proyectos y, en definitiva, de actividad. ¿Se podría decir que la situación actual del colegio es un reflejo de la propia evolución de Arcos desde la óptica social e incluso urbanística?
–Indudablemente todas las circunstancias que apuntas influyen decisivamente. No obstante, a día de hoy, el colegio disfruta de los mismos servicios y actividades que pueda tener cualquier otro colegio de Arcos. El que no haya una ratio elevada puede ser un valor a estimar, pues permite a los profesores aplicar una enseñanza individualizada, pudiendo atender mejor a los diferentes estilos y ritmos de aprendizaje de los alumnos.
Con ese panorama, ¿por dónde cree que pasa el futuro de un colegio que viene coexistiendo con la despoblación del casco antiguo donde se ubica?
–El futuro nadie lo sabe. Yo voy a hablarte del presente. Tras unos años difíciles y contra todo pronóstico, a pesar de la baja natalidad y la despoblación del casco antiguo, el colegio no para de crecer. Parece que fuéramos a contracorriente. En un contexto en el que, como en este mismo periódico hemos podido leer hace no mucho, la inmensa mayoría de los colegios de Andalucía pierde alumnado, el nuestro presenta un crecimiento de más de veinte alumnos con respecto al curso anterior y en la etapa de Infantil no había tantos niños desde 2008. No sé si este repunte será circunstancial, pero parece que el trabajo realizado en los últimos seis años comienza a dar sus frutos.
Como autor del libro, ¿de qué fuentes ha bebido? ¿Se ha encontrado en el camino de la investigación algún hecho especialmente llamativo que hoy, aquí, nos quiera desvelar?
–Esta obra es fruto de un trabajo de investigación que se ha prolongado durante tres años de frecuentes visitas al archivo municipal, donde es posible encontrar una profusa documentación acerca de la educación en Arcos en los siglos XIX y primera mitad del XX. La segunda fuente de información en importancia la constituye el archivo del propio colegio y tras ésta, el archivo del IES Padre Coloma de Jerez (al que estaba adscrito el Colegio de Segunda Enseñanza), la biblioteca del Cronista Manuel Pérez Regordán, el archivo de la familia Velázquez-Gaztelu Vecina y otras aportaciones de particulares.
Háblenos del acto de presentación del próximo 4 de octubre. Tengo entendido que ya se vive como un auténtico acontecimiento dentro del colegio y en los círculos culturales de nuestra ciudad...
–La presentación de este libro está circunscrita en la conmemoración de los 350 años que este año cumple el colegio. Han confirmado su presencia numerosos antiguos alumnos y personas interesadas en la historia y en la educación en Arcos. No va a ser una presentación convencional, puesto que la música y la dramatización de momentos históricos del colegio a cargo de los actuales alumnos del centro va a hacer más vistosa la actividad. Ya que mencionas a los círculos culturales, debo comentarte que el libro cuenta también con colaboraciones de personas destacadas de dicho ámbito, como son por ejemplo, Pepa Caro, Pedro Sevilla y algunos más. Tras la presentación, nos dirigiremos al colegio para inaugurar unos azulejos alusivos a la historia del centro y una exposición de curiosidades y documentos relevantes de la historia del colegio.
