El Club Deportivo Natación Sanlúcar, que tiene como presidente a José Antonio Reyes, está deseando regresar a la máxima normalidad. Sus nadadores no entrenan desde mediados de marzo tras decretarse el Estado de Alarma en España debido a la expansión del coronavirus en el país y en el resto del mundo, así como del cierre de las instalaciones deportivas.
La entidad de la Ciudad de la Manzanilla está deseando utilizar la Piscina Cubierta e incluso pide disponer de la del Polideportivo Municipal para aliviar la situación. Em ambos casos con las lógicas medidas sanitarias y de seguridad. Puede formar grupos de 20 nadadores aunque el problema se centra en los horarios.
Recuerda que la aparición del COVID-19 hizo que el pasado 13 de marzo tuviera que paralizar su actividad en la Piscina Municipal Manolo Gallego, situación que “nos ha cambiado la vida y ha alterado nuestros hábitos de una forma muy rápida”.
Teniendo en cuenta esta situación, la dirección técnica elaboró un gran plan de actividades para estos más de dos meses de confinamiento que se ha permanecido en casa, con el fin de dar un servicio a los deportistas y socios que limiten al mínimo posible su deterioro del rendimiento, formación y de su salud.
Gracias a la Fase 2 consiguió elaborar un plan para la vuelta a la rutina de forma progresiva y con un protocolo de actuación que permitiera hacerlo de forma segura y ordenada: “Dicha actividad la hemos llevado a a cabo en la playa, algo que no es para nada parecido a nuestro deporte y actividad, pero adaptándonos a las circunstancias”.
Hace constar que “estamos viendo a numerosas provincias y clubes comenzando con su actividad en las piscinas o con alguna previsión de apertura de estas, ya que como decretó el BOE, el uso de las piscinas cubiertas y descubiertas, están autorizados desde la Fase 1 para deportistas federados con un aforo del 30% de la instalación, pero nosotros aún no tenemos ni si quiera previsión”.
Indica que “esperamos que próximamente tengamos una mínima previsión y ayuda para volver a nuestra actividad, ya que somos el deporte más afectado por las particularidad de que se practica en el agua, y hasta entonces no la hemos recibido. Llevamos muchos años trabajando para conseguir lo que somos y será difícil recuperarlo si no se ponen soluciones reales y efectivas”.
Deja claro que “esto no es un negocio, es la ilusión, el esfuerzo y el trabajo de muchos niños que como deportistas que son luchan cada día por sus sueños y que a pesar de esta situación lo siguen haciendo. Y ademas, los puestos de trabajo de muchos entrenadores. Rogamos que se nos escuche y nos den una solución a todo esto, de no ser así, nuestro club puede verse muy afectado”.
Espera soluciones.
