José Ortells, secretario de Vox hasta ahora, toma el relevo de José María Torrego y se sitúa al frente del partido en la provincia con el reto de reforzar la estructura territorial de la formación y consolidarse como primera opción en el bloque de centro-derecha. Lo hace, asegura, con ilusión renovada después de haber sufrido en su propias carnes los rigores de la infección por coronavirus, que le llevaron a estar ingresado dos semanas pero “fuera de juego”, casi dos meses y medio en total. “El personal sanitario, desde quien limpia las habitaciones al médico, se ha sacrificado y merece todo el agradecimiento del mundo”, remarca. Ahora, adelanta, la organización retomará con más fuerza el trabajo político interrumpido durante el confinamiento. Pero subraya que sus integrantes no han estado quietos: “Hemos hecho mucho voluntariado para ayudar a muchas personas”.
Vox ha declarado que el objetivo de la nueva etapa es reforzar la estructura territorial.
–Empezamos muy fuerte en febrero pero vino el confinamiento. Ahora queremos que aumente la capilaridad del partido en toda la provincia para que nuestro mensaje llegue a todos los gaditanos sin filtros. Para ello, es fundamental que contemos con coordinadores y equipos de trabajos en todos los municipios. Tenemos estructura prácticamente en el 80% de las localidades. Pero en la primera reunión de la gestora tenemos previsto hacer 16, 17, 18 nombramientos orgánicos en toda la provincia.
¿Da por superadas las fricciones internas?
–Yo me llevo bien con todo el mundo. En un partido, no todo el mundo puede estar de acuerdo al cien por cien con lo que se haga, pero hay que seguir las normas. Puede haber discrepancias, pero no hay fricciones.
“Tenemos cosas en común con Cs y PP, pero no somos bloque compacto; tenemos un mensaje coherente, no lo vamos a cambiar por una alianza electoral”
¿El saldo de afiliaciones es positivo?
–Se ha quedado estable por el confinamiento. Pero en julio, sin haber hecho ninguna campaña, el censo se ha elevado levemente. Tenemos nuevos afiliados del PP y Ciudadanos, en la misma proporcion, incluso nos sorprende alguno del PSOE y Unidas Podemos. Se nos califica de extrema derecha pero realmente somos un partido que quiere que se conserven los valores tradicionales de este país. Y eso no es de izquierda ni de derecha. Por eso estamos captando a muchos simpatizantes que antes votaban a otros partidos.
¿Es partidario de una candidatura única de centro-derecha entre PP, Ciudadanos y Vox?
–Una de nuestras fortalezas es que tenemos un mensaje muy claro y coherente, no engañamos a nadie y no lo vamos a cambiar por una alianza electoral. Podemos tener cosas en común con PP y Ciudadanos, pero no somos un bloque compacto. No podemos apoyar lo que piensa PP y Ciudadanos sobre muchos temas. Queremos bajar y eliminar impuestos, queremos expulsar a los menas e ilegales, queremos derogar la Ley de Memoria Historica, eliminar duplicidades... que PP y Ciudadanos votan en contra.
¿Teme que les pase factura la situación del juez Serrano, acusado de presunta corrupción?
–Somos respetuosos con la Ley. Y Serrano se ha ido al grupo de no adscritos en el Parlamento andaluz para poder defenderse sin tanta presión mediática. En Vox defendemos la presunción de inocencia y por eso esperaremos a que haya una sentencia para valorar este caso.
¿Juan Carlos Monedero ha acusado a Vox de ser acosado en Sanlúcar?
–Lo que diga el señor Monedero, la verdad, es que a nosotros no nos importa mucho. Pero yo he hablado con afiliados de Vox en Sanlúcar y lo que sí me consta es que no había ningún afiliado de Vox en ese bar. Lo que pasa es que estas personas de ultraizquierda siempre tienen en la boca a Vox cuando no le gustan que le hagan escraches cuando ellos han sido los incitadores de escraches a cualquier partido en toda España. Vox no ha tenido nada que ver. No somos partidarios de ese tipo de actuaciones, cuando nos reunimos con afiliados, pedimos que esas cosas no se hagan porque somos un partido democrático que creemos que todo el mundo tiene derecho a expresar sus opiniones. A nosotros nos han tirado piedras y nos han escupido en el País Vasco y Galicia y Monedero y su partido han estado callados.
Sin embargo, su concejal en Sanlúcar lamentaba no haberse enterado que estaba Monedero porque le habría dicho algunas cosas.
–No te lo puedo comentar porque no lo he leído. Pero el martes estuve hablando con él y lo que me comentó es que, como aseguró en el Pleno, nadie de Vox estuvo en el bar.
“No somos partidarios de escraches, pero cuando lo sufrimos, Monedero y su partido han estado callados”
¿Qué papel ha jugado Vox durante la pandemia?
–Durante la pandemia no hemos hecho discurso político. Hemos llevado a cabo una labor callada, de voluntariado, ayudando a muchas personas, como un compañero isleño, Jesús, antiguo infante de Marina, jubilado, que todos los días salía a buscar material para mascarillas, tenía un grupo de costureras, y las distribuía entre policía y hospitales cuando no había material de protección.
Vox preside la comisión parlamentaria para la recuperación. ¿Tendrá Cádiz un papel especial?
–El presidente de la comisión, Manuel Gavira, es parlamentario andaluz por Cádiz, y junto a Ángela Mulas, está trabajando para tomar las medidas adeucadas. Pero es difícil porque la economía no se va a arreglar con cuatro medidas que tomemos. Tampoco se arregla con ayudas sociales y paguitas. Hay que atacar a los verdaderos problemas que tienen los empresarios. Si no ayudamos a nuestro tejido empresarial, a pymes y autónomos, no estaremos ayudando a los trabajadores. Llegará un momento en que el Estado no tenga dinero para pagar y no sabemos los condicionantes que ha puesto Bruselas a España (para los fondos de recuperación), si nos van a pedir que se recorten las pensiones o que se suban impuestos. Hay que eliminar burocracia. Cuando un emprendedor va a crear una empresa, se ve obligado a tener un empleado expresamente para eso o gastar muchísimo dinero en un asesor.
Hay que sumar las demandas históricas.
–A esta provincia le hace falta una estrategia que a medio largo plazo la sitúe en el lugar que merece. Los partidos que hasta ahora han gobernado siempre han pensado en el hoy y no en el mañana. En Cádiz llevamos más de 30 años como se apagan fuegos y se contentan voluntades, pero no se invierte en formación, o se dota a la provincia de las infraestructuras necesarias. Tan solo hay que mirar hacia nuestro sector industrial, cada día más débil y con falta de mano de obra cualificada de nivel medio, o nuestro sector turístico que no acaba de emerger a pesar de tener un gran potencial que tiene nuestra provincia, y de nuevo aparece la formación otra vez. En el Campo de Gibraltar por ponerte un ejemplo, tan solo uno de los institutos que oferta estudios sobre hostelería es bilingüe. Si miramos para nuestra Sierra nos encontramos con problemas que llevan más de 30 años esperando soluciones.
