El fin de semana en Sevilla ha supuesto la recuperación de la normalidad en la práctica, con la población echada a las calles y, aunque mascarillas y algunas restricciones han impedido que se olvide que aún seguimos en pandemia, lo cierto es que si la incidencia no lo frustra, la ciudad encara un otoño de lo más esperanzador y que ya ha dejado los hoteles al 80%.
La Virgen de las Tristezas de la Vera Cruz y la Virgen de los Desamparados de Alcosa, en Rosario de la Aurora, daban el pistoletazo de salida cofrade por la mañana, con un dispositivo de tráfico y seguridad específico, además de ordenarse la afluencia de devotos que, tras año y medio de pandemia, querían ver los primeros pasos, en andas en esta ocasión y con más control en el transcurrir de las imágenes.
La prueba de fuego, en el centro, llegaba por la tarde con la procesión de la Divina Pastora de Santa Marina por el centro de la ciudad. Pruebas de antígenos previas a unos costaleros ya vacunados (todas negativas), mascarillas y gel hidroalcohólico bajo la trabajadera. El Simpecado de gala se abría paso entre el recorrido marcado y que fue aglutinando a cada vez más devotos por donde pasaba, sin permitir el paso entre la comitiva pero inevitables las pequeñas aglomeraciones en esquinas y zonas algo más estrechas. Sin incidentes destacables, la Divina Pastora de Santa Marina ha sido la primera hermandad que ha salido con costaleros en Sevilla tras año y medio de pandemia.
Para el Ayuntamiento, tras reducirse las restricciones por la pandemia, han coincidido distintos eventos en la ciudad con una importante afluencia de público y respeto generalizado hacia las limitaciones aún vigentes. “Así, la ciudad recupera el pulso, vuelve a demostrar su capacidad de organización y se prepara para un otoño repleto también de actividades que inciden en la vuelta a la normalidad y en la reactivación económica y laboral”, destacando el buen funcionamiento de los servicios públicos durante este fin de semana.
La ocupación hotelera ha rondado el 80 por ciento, según las estimaciones de la sociedad municipal Congresos y Turismo de Sevilla, que lo achaca al impulso del Arnold Sport Festival, el inicio de la feria taurina de San Miguel en la Plaza de la Maestranza, que atrae a un importante número de turistas nacionales, y la propia reactivación del turismo en los últimos meses.
De hecho, durante tres días han visitado Fibes alrededor de 20.000 personas para asistir al evento multideportivo del Arnold Sports Festival, el primero de carácter internacional el calendario del Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla tras la pandemia.
Asimismo, organizado por el Área de Economía en colaboración con Contursa, se ha desarrollado el desfile de apoyo a la moda flamenca, acompañado por música en directo, con la asistencia de unas 2.600 personas en la Avenida de la Constitución, que ha contado con un operativo amplio en el que han participado, además, del dispositivo policial, operarios de Lipasam y el Área de Movilidad. También hay que tener en cuenta el encuentro del Real Betis, que también contó con su dispositivo de apoyo específico.
Además, el Ayuntamiento ha destacado que sólo el sábado más de 4.000 personas visitaron el Real Alcázar de Sevilla, que ha colgado el cartel de completo en sus visitas teatralizadas nocturnas del fin de semana y en sus ciclos de conciertos Noches en los Jardines del Real Alcázar. Mientras, el ciclo ‘Circo Joven por Barrios’ ha recalado con su amplia programación de septiembre en Sevilla Este, Bellavista y Parque de María Luisa, con alrededor de 600 asistentes, que han llenado los espacios reservados para las funciones.
“En el caso del operativo policial, la atención a los distintos eventos se ha hecho compatible con la habitual labor de los agentes y el refuerzo que se acomete los fines de semana para continuar controlando el cumplimiento de las normas anti-Covid-19 vigentes, la botellona y los horarios de cierre de los establecimientos hoteleros, así como para garantizar el derecho al descanso de los vecinos”, ha asegurado el Ayuntamiento.
De hecho, el sábado, sobre las 2,20 horas de la madrugada, la Policía Local procedió al precintado de un establecimiento en la Plaza de San Francisco por exceso de aforo e incumplimiento de las medidas Covid-19. El establecimiento consta de tres plantas, con un aforo máximo distribuido entre las tres plantas de 111 personas, unas 37 por planta, pero en el momento de la inspección se encontraban dentro 187 personas, 117 de ellas en una de las plantas: de pie, bailando y consumiendo bebidas incumpliendo las medidas sanitarias contra el Covid-19.
