Sólo una de las cuatro personas afectadas por el brote de triquinosis en Alcalá la Real tras consumir embutido casero de jabalí se encuentra ingresada con pronóstico estable en el Hospital Virgen de las Nieves, en Granada, mientras que otras tres personas se encuentran en observación domiciliaria.
Así lo ha indicado el gerente de SAS, Miguel Ángel Guzmán, a preguntas de los periodistas durante la rueda de prensa en Jaén para la presentación del Plan de Alta Frecuentación. De esta forma, ha señalado que el paciente hospitalizado es "el único que tiene infección detectada positiva", mientras que el resto "no tienen la infección confirmada".
Guzmán ha confirmado también que el embutido se elaboró con carne procedente de dos jabalíes a los que la familia le realizaron los correspondientes análisis veterinarios a los dos jabalíes y en los que no se detectaron la presencia de triquinosis. "Sabemos que es en este caso han existido esos análisis veterinarios que en principio no han detectado esa presencia de triquinosis", ha dicho el gerente del SAS.
Ha explicado que hay dos técnicas de análisis veterinario para detectar la presencia de triquinosis, aunque una de estas técnicas basada en el análisis de muestras intestinales "está en desuso". Ahora, será Salud Pública la que en este caso tendrá que "estudiar y comprobar qué técnica se ha utilizado para esa detección" en el caso de Alcalá la Real.
No obstante, el gerente del SAS han incidido en el mensaje de que "se consuma la carne una vez que los análisis veterinarios correspondientes estén realizados y estén contrastados y las familias tengan esa seguridad".
Ha añadido que el embutido contaminado en Alcalá la Real era para autoconsumo familiar por lo que "no hay motivo de preocupación" en cuanto a la distribución del alimento puesto que no ha salido del domicilio.
La investigación del brote se inició a raíz de un paciente que acudió el pasado 28 de enero a urgencias del Hospital Virgen de las Nieves, el cual manifestó haber consumido parte de un embutido de carne de jabalí en el ámbito familiar.
En ese momento, la Delegación Territorial de Salud y Familias de Granada, puso en marcha las actuaciones tanto de vigilancia epidemiológica como de protección de salud. Fruto de esas actuaciones se advirtió que el consumo se había producido en el seno de una familia del municipio de Alcalá la Real (Jaén), por lo que las actuaciones se ampliaron a la provincia de Jaén.
Aunque la investigación continúa en curso, los datos hasta ahora conocidos, según se ha informado desde Salud, indican que el origen se encuentra en un embutido elaborado de forma casera en un domicilio particular y que la carne tiene su origen en un jabalí procedente de una matanza particular.
En total hay cuatro personas afectadas que ya están recibiendo el tratamiento adecuado, tres pertenecientes a la misma familia y la otra relacionada con ella. Por otro lado, se contabiliza que hay 13 personas expuestas más con las que se está contactando para efectuar su seguimiento, diagnóstico y, en caso necesario, administración de tratamiento. Los expuestos tienen relación familiar con los afectados, no detectándose comercialización de los productos elaborados de forma casera.
Por su parte, todos los productos afectados y que aún permanecían en el domicilio familiar, han sido inmovilizados y se procederá a su destrucción higiénicamente. Previamente, se han tomado muestras de los mismos.
Asimismo, la investigación también se está centrando en conocer con exactitud el circuito seguido desde la propia caza del animal hasta su consumo y si se han seguido las normas establecidas por esta Consejería de Salud y Familias. Según la normativa vigente todas las piezas de caza mayor deben ser sometidas a una adecuada inspección post-morten y examen mediante método de digestión con agitador magnético por veterinario autorizado, no siendo válidos los métodos conocidos como triquinoscopia.
La triquinosis es una enfermedad parasitaria que afecta a los humanos y a numerosas especies hospedadoras, principalmente mamíferos silvestres y domésticos, producida por diversas especies del género Trichinella. En España, las especies habitualmente identificadas son T. spiralis y T. britovi. Además, en 2014 se detectó por primera vez en España T. pseudoespiralis.