La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía ha informado favorablemente al proyecto para hacer accesible y visitable los Baños de la Tropa, ubicados en el segundo recinto del Conjunto Monumental de La Alcazaba, a través de una intervención que defina los espacios y permita recuperar "la integridad formal y material de la construcción" con un grado suficiente de seguridad para los usuarios.
El acuerdo, consultado por Europa Press, da el visto bueno a una actuación encaminada a la recuperación de estancias para su puesta en uso con una única salvedad encaminada a que el proyecto sustituya los barrotes verticales para las barandillas metálicas que deberán implementarse por otras 'tipo Alhambra', que se corresponden con el modelo adoptado en el conjunto monumental.
El objetivo es poder volver a acceder a un inmueble, ubicado al norte del área palacial adosado a la muralla islámica, el cual albergaba los baños públicos de la Alcazaba en época andalusí, ya que los mismos fueron reconstruidos en el siglo pasado con muros de hormigón sobre los tapiales originales.
El edificio fue objeto de una restauración en los años 70, con reconstrucciones sobre los restos originales que fueron recubiertas con cal, yeso y cemento. En los años 2006 y 2009 estos baños fueron intervenidos arqueológicamente.
Así, el proyecto contempla la limpieza arqueológica y algunas consolidaciones de urgencia antes de la colocación de pasarelas. En concreto, y conforme el acuerdo adoptado el pasado mes de julio, se contemplan trabajos previos de limpieza mediante cepillado manual de los paramentos, retirada de tierras acumuladas en las distintas salas de los baños, y retirada de restos de elementos inadecuados que provienen de anteriores trabajos realizados en el edificio.
Estos trabajos de limpieza se centran en el adecentamiento y la adecuación de las salas para hacerlas visitables, sin llegar a realizar trabajos de restauración. Asimismo, se incluirá la colocación de geotextil y extensión de gravilla en algunas salas y la estabilización de un elemento que actualmente está apuntalado con un puntal provisional de obra metálico.
Posteriormente, la actuación deberá dirigirse a la consolidación de las coronaciones de los muros de ladrillo en varios puntos del edificio, con la recolocación de las piezas sueltas y sellado de fisuras con mortero de cal.
Para resolver la accesibilidad al edificio se han definido dos tipos de pasarelas: una primera solución exterior, desde el punto de acceso de recorridos peatonales actuales en el segundo recinto hasta la puerta de acceso de los baños, y una segunda solución, dentro de los baños, con un primer tramo en el patio descubierto del actual acceso y un segundo tramo cubierto, en la sala del hipocausto.
En el caso del primer tramo, se considera oportuno articular una pasarela de 1,3 metros de anchura de listones de madera de pino tratado, sobre rieles de madera, apoyado sobre capa de grava, igual a la existente en el resto de los recorridos exteriores de la Alcazaba.
Para el interior, también se prevé pasarelas de 1,3 metros de ancho, en este caso metálicas, con base de tramex y barandillas, ancladas con pernos a los muros reconstruidos en los años 70, y con una altura de entre 120 y 80 centímetro sobre la cota de la excavación arqueológica, y unos 20 centímetros sobre la coronación del horno y umbrales de las puertas de paso entre las salas, de manera que las pasarelas conectan las puertas de acceso al recinto con el acceso a las naves interiores.
El proyecto culmina con el acondicionamiento de la visita al recinto con iluminación en las salas interiores, colocación de soportes con cartelería informativa, y limitación del paso en algunos puntos con postes metálicos verticales y cuerda entre los soportes. También contempla cubrir los huecos abiertos en las bóvedas, con la colocación de una estructura metálica de soporte para un cristal de seguridad con el que evitar la entrada de agua de lluvia.
