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Almería

COAG alerta una "importante oleada de robos" de las estructuras de invernaderos y colmenas

Según el coodinador provincial de COAG, Andrés Góngora, los "no tienen miedo" y "se desplazan inclusive con pequeños generadores de electricidad donde enchufan las herramientas para cortar este material y poder trasladarlo"

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La organización agraria COAG ha alertado este jueves de una "importante oleada de robos" en las explotaciones agrarias invernadas de la provincia de Almería en las que los ladrones "no sólo destrozan almacenes y cortijos agrícolas para perpetrar los robos" sino que incluso "están desmontando las estructuras de los invernaderos para llevarse tubos de hierro galvanizado, alambres y todo lo que pillan a su paso".

   Según el coodinador provincial de COAG, Andrés Góngora, los "no tienen miedo" y "se desplazan inclusive con pequeños generadores de electricidad donde enchufan las herramientas para cortar este material y poder trasladarlo"

   Ante esto COAG ha anunciado que va a solicitar la próxima semana una reunión con el subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés García Lorca, al quien van a solicitar que se "refuerce" la seguridad en el medio rural, ya que las explotaciones agrícolas "son muy vulnerables y se encuentran a la merced de los ladrones que ante la impunidad de la justicia continúan delinquiendo".

   Góngora, quien considera que "se deben endurecer las penas", cree "primordial" que la Administración "controle los centros de venta de los materiales robados". "Los agricultores que compren material de segunda mano deben de comprobar que éste no es robado exigiendo al vendedor su correspondiente factura de compra".

   Así, apunta que coincidiendo con el proceso de polinización de melón y sandía, así como la escasez de colmenas, la provincia de Almería y en especial la zona de Levante, está "sufriendo también un ataque de robos una preocupante situación que los apicultores".

   "Desde COAG queremos advertir a los agricultores que tengan especial cuidado a la hora de contratar las colmenas para su cultivo. Es necesario que se cercioren de que esas colmenas no son robadas y para eso deben exigir su correspondiente factura o el libro de explotación del apicultor. Hay que recordar que adquirir un material robado también constituye un delito para quien lo compra", ha añadido Góngora.

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