La Fuerza Terrestre (FUTER), el conjunto de unidades más importante del Ejército de Tierra cuyo cuartel general está en la sevillana Plaza de España, participa desde 2017 en una operación de disuasión de la OTAN ante la amenaza rusa en Ucrania, que comenzó tras la invasión de la península de Crimea por parte de las Fuerzas Armadas de Vladimir Putin.
En concreto, mantiene desplegados a más de 300 soldados, suboficiales y oficiales, además de carros de combate Leopardo 2E y vehículos de combate de infantería y caballería Pizarro, que pertenecen a la Brigada Guzmán El Bueno X (BRIMZ X), con base en Cerro Muriano (Córdoba).
Fuentes de la FUTER han alegado “confidencialidad” para no desvelar el número exacto de carros de combate desplegados en el país báltico, aunque en una reciente visita de la ministra de Defensa, Margarita Robles, a la base de Adazi (Letonia) a unos 100 kilómetros de la frontera rusa, el diario El País informó de la presencia de seis Leopardo y quince Pizarro como parte de esa fuerza de disuasión que entraría en combate en caso de ser requerido por la Alianza Atlántica.
Aunque orgánicamente esas unidades pertenecen a la BRIMZ X, que a su vez está integrada en la Fuerza Terrestre, el mando de operaciones es del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD).
Este diario ha podido saber que cada jueves tiene lugar una videoconferencia, coordinada por el Cuartel General de la Fuerza Terrestre, en la que participan los mandos desplegados en Letonia. El objetivo de esa comunicación es conocer las necesidades de logística y relevos de las tropas desplegadas en Adazi.
Este despliegue, iniciado en 2017, supuso la primera puesta en escena de los Leopardo y los Pizarro en misión internacional. En principio, se trataba de una participación anual, con rotaciones semestrales, pero debido a la amenaza rusa se mantiene hasta la actualidad, cobrando en este momento una mayor dimensión pública.
Además, la Fuerza Terrestre mantiene un oficial de enlace en Rumanía en el marco del despliegue de la Alianza Atlántica para prevenir una posible acción militar de Rusia contra Ucrania u otros países de su entorno.
Las unidades de la FUTER también han participado, durante los últimos años, en misiones de paz en Bosnia, Kosovo, Afganistán, Líbano, Irak, Mali, República Centroafricana, Turquía o Colombia, además de Letonia.