El Gobierno de Juanma Moreno acudirá a los tribunales en caso de que el Ejecutivo de Pedro Sánchez “maniobre” en contra de su última rebaja fiscal, que incluye la supresión del impuesto de Patrimonio, la congelación del canon del agua y la deflactación de los tres primeros tramos del IRPF.
Una advertencia judicial de Moreno al Gobierno de España, que acusó a la Junta de hacer “dumping fiscal” y “eliminar impuestos a los privilegiados” para luego reclamar dinero a “papá Estado”.
“Me sorprende la reacción del Gobierno central, que ha estado en un ataque iracundo que demuestra la incoherencia y la falta de discurso propio en materia fiscal”, ha indicado Moreno, quien este mismo miércoles ha firmado el decreto de rebaja fiscal que convierte a Andalucía en la segunda comunidad autónoma de toda España con menor presión fiscal.
El objetivo de la Junta es “atraer inversores” y competir “de tú a tú” en las “grandes ligas” económicas de España, dominadas por Madrid y Cataluña. De hecho, Cataluña es el punto de mira de Moreno, a cuyos empresarios quiere atraer Moreno, con llamamientos claros a afincarse en Andalucía.
Es por ello que la Junta plantea la opción de abrir una oficina en Cataluña para atraer inversores hacia Andalucía. Ya Andalucía cuenta con una en Madrid y ahora lo que se persigue es vender las bondades fiscales de la comunidad andaluza. Habrá un delegado político al frente de esta oficina de Andalucía en Cataluña que será nombrado por el Consejo de Gobierno.
Ya el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha pedido este miércoles al PP dejar la “catalanofobia fiscal” para intentar ganar votos para lograr llegar a La Moncloa. Aragonès ha sostenido que cada territorio puede hacer las políticas que considere oportunas pero las rebajas fiscales de Moreno no están dirigidas a la economía andaluza, sino a utilizar Cataluña “para intentar arañar votos”.
El Ejecutivo andaluz quiere presentar a Andalucía como un valor seguro para los empresarios ante la situación económica que se prevé para los próximos años y para ello baja impuestos con el fin de que sirva de “refugio” y atracción a los grandes capitales, también extranjeros que pasan gran parte del año en la comunidad.
Continuas críticas
Sin duda la rebaja de impuestos diseñada por Juanma Moreno ha tenido un notorio impacto nacional. Es más, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido en el Congreso reducir el margen de las comunidades para llegar a suprimir la tributación de los impuestos sobre los que tienen competencia. Para ello, el Gobierno de España explora la opción de gravar a las grandes fortunas y “armonizar” los impuestos autonómicos.
Sobre esta propuesta del Gobierno de Pedro Sánchez, el PP ha tildado al PSOE de estar “podemizándose”. Lo ha dicho el andaluz Elías Bendodo, ahora número 3 del PP nacional.
Mientras tanto, el PSOE en Andalucía ha criticado que la “medida estrella” de Moreno sea “dar una paguita a los Cayetanos”. La portavoz socialista en el Parlamento ha remarcado que la supresión en la práctica del impuesto de Patrimonio sólo beneficia “al 0,2% de la población” andaluza, a unos “17.000 ricos”.
Vox sí ha mostrado su respaldo a la decisión del Gobierno andaluz de eliminar el impuesto de Patrimonio, pero ha reclamado a Moreno que no sea “timorato” con la rebaja fiscal y que elimine todos los tributos propios de la comunidad, como el canon del agua.
Por Andalucía ha considerado que el Gobierno andaluz pone a la comunidad en una “dinámica de confrontación” que está a disposición de los intereses del PP a nivel nacional. Y Adelante Andalucía ha asegurado que esta nueva rebaja fiscal de Moreno “obligará a hacer recortes en los servicios públicos”.